Los beneficios de las huertas orgánicas están a la vista: una cosecha sabrosa y en el punto exacto de maduración, la recompensa económica y la tranquilidad de que lo que llevamos a la mesa familiar es libre de agroquímicos.
Si vivimos en plena urbe, pareciera que la posibilidad de armar una huerta productiva y rendidora está lejos, ¿es realmente así? No, solo que llevarlo adelante requiere el uso de inteligencia e ingenio. El diseño debe aprovechar al máximo los sectores reducidos. Tendremos que descubrir las posibilidades de incorporar elementos propios del medio rural en espacios como balcones, terrazas o patios.
Hay que tener en cuenta factores muy importantes como son la cantidad de horas de sol que recibirán las plantas, los vientos (en balcones altos) o el exceso de sol en terrazas que puede quemarlas.
* Balcones
Las macetas se ubicarán de forma tal que las de mayor tamaño queden por detrás de las más bajas para que las plantas más altas no proyecten sombra sobre las más pequeñas.
* Terrazas
El gran enemigo: el exceso de sol en verano puede dificultar el desarrollo de las hortalizas de hoja. Esto se soluciona con la instalación de una malla media sombra. Esta mantendrá las plantas frescas, reduciendo la frecuencia de riego y el estrés causado por el exceso de energía solar.
* Cocina
La cocina también será una zona de producción, ya que es el lugar ideal para las siembras y para la germinación de los brotes que aumentarán nuestra cosecha sin el recurso del suelo.
* Paredes productivas
Instalar en las paredes estantes resistentes a la intemperie es una forma de duplicar el lugar. Sobre ellos podemos colocar macetas livianas de 0.30 m de profundidad y cultivar plantas pequeñas (lechuga, espinaca, ciboulette, radicheta, rúcula y muchas aromáticas).
Otra opción es cultivar especies trepadoras armando algún soporte donde puedan sostenerse: alambre, malla metálica o entramado de madera son algunas de las opciones. Arvejas, vegetales, chauchas o pepinos podremos cultivar sin inconvenientes.
¿Cuáles son las verduras/hortalizas por las que conviene empezar si no tenemos experiencia?
Las más nobles son (con poco espacio) los rabanitos, las rúculas, las lechugas… Con algo más de espacio (a tierra) los zapallitos, las berenjenas; los tomates son muy productivos y permiten valorar la diferencia entre un fruto comprado en la verdulería y uno recién cosechado.
Los tiempos de cultivo van a depender de cada especie. Las hay de 1 mes como los rabanitos hasta de 4 – 5 meses como los brócolis o los coliflores. Depende la región dónde vivamos van a existir verduras que prefieren el calor como los choclos o los zapallos a verduras que disfrutan de temperaturas más frescas como las de hoja en general o las crucíferas como los brócolis o los repollos.
Macetas para cada lugar
* En terrazas: son determinantes el peso y las elevadas temperaturas a las que están expuestas las macetas en verano.
* En balcones: observar el peso del material de fabricación. Los plásticos son los más adecuados.
* En patios: el peso no es determinante, pero si hay falta de luz solar en invierno es conveniente incorporar un sistema de ruedas en las macetas más pesadas.
Macetas recicladas: se pueden usar envases reciclables como bidones de agua, jarros, etc.
Extractos del libro «Huertas orgánicas» de Gabriela Escrivá. Editorial Albatros.