Los hay de muchas marcas y colores, y con tantas opciones que no es fácil saber cuál es la más adecuado para nosotros. Hablamos de los numerosos dentífricos que se encuentran en los estantes de supermercados y farmacias. Evidentemente todos sirven para cepillarse los dientes, pero pueden hacer mucho más por la salud dental. No es lo mismo tener una boca sana que sufrir de encías que sangran o sensibilidad.

Juan Carlos Llodra, profesor titular de Odontología Preventiva y Comunitaria de la Universidad de Granada, y director ejecutivo del Consejo General de Dentistas de España, explicó a BBC Mundo qué es lo que hay que tener en cuenta a la hora de comprar un dentífrico.

Prevenir las caries

Si tenés una boca sana y querés prevenir las caries, sólo tenés que ser constante con tu higiene bucal y utilizar una pasta de dientes que contenga flúor. Éste ayuda a remineralizar el esmalte, reforzarlo y eliminar la placa, de modo que las bacterias no puedan perforarla y crear una caries.

El flúor es el elemento de mantenimiento de las bocas sin problemas.
El flúor es el elemento de mantenimiento de las bocas sin problemas.. Foto: Thinkstock

Pero, según el experto, es esencial que el dentífrico tenga una cantidad de flúor superior a 1.000 partículas por millón (ppm). «Los dentífricos que son bajos en flúor, por debajo de mil ppm, no sirven para nada», le dijo Llodra a BBC Mundo. «Cepillarse los dientes con esas pastas de dientes o cepillárselos sin pasta es lo mismo», agregó.

Según Llodra, lo más habitual es que un dentífrico tenga una concentración de flúor de 1.500 ppm. Además, Llodra aconseja no enjuagarse la boca con agua tras el cepillado ya que el agua arrastra el flúor reduciendo considerablemente su efecto. Lo aconsejable es escupir la pasta sin aclararla.

Aliviar la sensibilidad dental

Si al morder alimentos e ingerir bebidas calientes o frías notás dolor, es que tenés sensibilidad dental, por lo que se recomienda el uso de dentífricos diseñados para solucionar este problema. «La sensibilidad en los dientes, es un síntoma de que el esmalte se está desgastando», dijo Llodra.

El experto explicó que este tipo de dentífricos contienen sustancias que tapan los poros que se han producido en la dentina y que conectan con los nervios del diente, provocando la reacción a los cambios de temperatura.

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Enfermedades periodontales

La gingivitis es una enfermedad bucal generalmente bacteriana que provoca inflamación y sangrado de las encías. Cuando se tiene este problema necesitamos una ayuda adicional, según Llodra. En estos casos se necesita un dentífrico más potente que además de flúor contenga algún antiséptico más potente como el triclosán.

Ahora bien, «estas pastas como van dirigidas a un problema específico no deben utilizarse más de dos semanas. Si el problema persiste hay que consultar a un dentista», dijo Llodra. «En la mayoría de las veces es un problema banal que se resuelve muy fácil pero hay determinadas enfermedades como la leucemia que se acompañan de gingivitis».

Blanquear dientes

Tener dientes blancos es cada vez más popular. Por eso muchas personas optan por dentrífricos blanqueadores esperando conseguir una sonrisa deslumbrante. Pero, al parecer, estas no son demasiado efectivas por sí solas.

Según Llodra, la pasta para blanquear los dientes se recomiendan para reforzar y mantener los efectos de un tratamiento de blanqueamiento dental realizado en la consulta del odontólogo. También, facilita la eliminación de las manchas leves del día producidas por el café, el tabaco, y otros elementos. Sus principales componentes suelen ser el peróxido de carbamida y el bicarbonato sódico.