El ministro de Economía, Danilo Astori, se manifestó a favor de cuidar la calidad del gasto público, pero dijo no compartir los juicios que lo atribuyen a un “despilfarro de recursos”. Indicó que entre 2004 y 2016 el PBI creció 73% y que el gasto público lo hizo 3,5% sobre el producto. Agregó que el componente social para reducir la pobreza representó más de 70 % del gasto público total y que eso no puede considerarse un despilfarro.
Durante su exposición en el almuerzo de la Asociación de Dirigentes de Marketing, el titular de Economía y Finanzas sostuvo estar “absolutamente de acuerdo con contener el gasto público”, y agregó que no importa solo la cantidad del gasto, sino también la calidad, sobre todo en un país que tiene restricciones para disminuir cuantitativamente el volumen del gasto público.
Sin embargo, agregó que no comparte los juicios negativos que atribuyen al Gobierno un “despilfarro de los recursos públicos”, porque eso significa exagerar la magnitud de la importancia del gasto público y porque significa ignorar el destino del gasto público. Resaltó que el gasto público social representa más del 70 % del gasto público total en el Uruguay.
“Si el gasto público social fue para disminuir la pobreza, y, si, además, la distribución del ingreso, medida a través del índice de Gini, cae notoriamente mientras el producto crece, esto no puede estar ausente en una discusión sobre si la palabra despilfarro se adecúa o no a la evolución del gasto público en el pasado», indicó.
Astori recordó que entre 1990 y 1999 el producto bruto interno (PBI) se expandió 37 % en términos reales, y la relación del gasto público del gobierno central y el BPS sobre el PBI se incrementó en 7 puntos. También señaló que entre 2004 y 2016 el PBI se incrementó 73 % y la relación del gasto del gobierno central y el BPS sobre el PBI se incrementó en 3,5 puntos. Agregó que, si bien la economía uruguaya fue una de las que más creció en América Latina, se ubicó en el tercer lugar entre 2004-2016, Uruguay es uno de los que ocupa los últimos lugares en materia del gasto del gobierno central sobre el PBI.
Enfatizó que lo que está en discusión es la calidad del gasto. “Hay una notoria diferencia a favor del período 2004-2016 en materia de importancia absoluta y relativa del gasto público”, dijo. Además, destacó que existe otro gasto publico fuera del que realiza el gobierno central y el BPS, concretado por algunas empresas públicas que realizaron inversiones en otros ámbitos, como Antel, entidad sobre la que valoró que destacó al país en América Latina en materia de telecomunicaciones, y UTE, sobre la que enfatizó que cambió la matriz energética del país en solo tres años. “Me parece que tampoco en estos casos podemos hablar de despilfarro”, expresó.
No obstante, el ministro reconoció que hay aún problemas por resolver en materia de calidad del gasto, que, afirmó, no pertenecen solo al Ministerio de Economía y Finanzas, sino que son de todo el gobierno. “Con la mejora de la calidad del gasto nos tenemos que comprometer todos, no con voces aisladas que convoquen a mejorar la calidad del gasto y después entre todos no hagamos nada”, aseveró.
FOTO E INFORMACIÓN: Presidencia y Twitter MEF