Uruguay fue primero en América Latina en 2017 con 21 donantes por millón de habitantes. El Ministerio de Salud Pública trabaja en una Red Nacional de Donación y Transplante que agilice la captación de pacientes con muerte encefálica para incrementar el número de donaciones. El ministro Jorge Basso dijo que hay que erradicar la centralización, ya que el 82 % de los pacientes en condiciones de ser donantes están en Montevideo.
El promedio latinoamericano en donación de órganos es de 7,2 donantes cada millón de personas. En Uruguay, el indicador fue de 21 donantes por millón de personas. Para agilizar aún más las posibilidades de donar órganos, este lunes 16 se realizó una nueva ronda para implementar la Red Nacional de Donación y Transplante, confirmó el ministro de Salud Pública, Jorge Basso.
La reunión fue presenciada por autoridades del Ministerio de Salud Pública (MSP), el Instituto Nacional de Donación y Transplante (INDT), jefes de servicio de los centros de terapia intensiva de adultos y pediatría, Comisión Honoraria de Medicina Intensiva y Sociedad Uruguaya de Medicina Intensiva, quienes designarán un responsable que comunicará y gestionará los datos ante fallecimientos cerebrales.
Con la legislación vigente desde 2013, la negativa familiar en adultos representa menos del 1 % como causa de pérdida de donantes potenciales, por lo que la fuga o pérdida de potenciales donantes se debe a fallas en la comunicación o dificultades en el diagnóstico de las muertes encefálicas que se producen en las unidades de cuidados intensivos (UCI).
Los expertos consideran que, para mejorar las cifras, es necesario optimizar al máximo la captación de muerte encefálica institucionales, lo que implica la participación y el compromiso de todas las unidades de cuidados intensivos (UCI) y todos los intensivistas del país.
Según se destacó en la actividad, en el país, los órganos para transplantes se obtienen de los pacientes fallecidos en muerte encefálica, entre el 1 y el 3 % de los fallecidos hospitalarios y hasta el 8 % de los fallecidos en una unidad de cuidados intensivos. El ministro reconoció que se trata de un tema complejo y delicado en el cual hay que avanzar e informó que actualmente hay unas 500 personas en lista de espera.
“Tenemos que lograr salir de la fuerte centralización de la captación de órganos y tejidos ya que el 82 % de las personas que están en condiciones de ser donantes están en los centros asistenciales de Montevideo”, aseguró.
Según explicó, actualmente el 82 % de las comunicaciones de muertes encefálicas corresponden a fallecidos de Montevideo y 4/5 partes de los donantes de órganos se captan a través del sistema sanitario de la capital. El 43 % de la población aporta el 80 % de los donantes de órganos para cubrir la demanda de los receptores de todo el país. Esta brecha es mucho mayor en los tejidos.
Los recursos humanos y la logística institucional necesarios para el funcionamiento de las unidades de donación y transplante serán financiadas por las instituciones del Sistema Nacional Integrado de Salud. El Instituto Nacional de Donación y Transplante brindará capacitación y apoyo logístico para las acciones de comunicación interna y externa y el reintegro de los costos por donante generados de acuerdo al arancel definido de 33.000 pesos uruguayos más IVA por operativo (el operativo equivale a un uso de 8 horas promedio de cama de UCI y acceso al block quirúrgico).