El volante de la selección uruguaya de fútbol, Matías Vecino, habló de su gol con Inter de Milán que devolvió al negriazul italiano a la Champions League tras seis temporadas y del comienzo de la preparación de cara al Mundial de Rusia 2018.
El ex Central Español, Nacional, entre otros, destacó que junto al gol con la selección sub 20 en el Sudamericano de Perú 2011, que clasificó a los charrúas a los Juegos Olímpicos tras 84 años de ausencia, en Londres 2012, el tanto conseguido sobre el final del encuentro con Lazio para la victoria 3-2, son los dos más importantes de su carrera.
Vecino dijo estar contento porque “cumplimos con el gran objetivo de la temporada. El hincha de Inter vive el fútbol de una manera muy linda. Se sufrió mucho, además es un club que tiene seguidores en toda Italia”.
Respecto a las incorporaciones de los volantes que dan un plus en la forma de juego, dijo que “no es fácil cuando se dan tantos cambios acoplarlos en poco tiempo y los que se integraron dieron muy buenos resultados. Hay tres semanas para prepararse y llegar de la mejor forma. Individualmente los compañeros tuvieron buenos desempeños”.
Consultado por la determinación de convocar a 26 futbolistas y no generar falsas expectativas en otros que por ahí no iban a tener una chance certera de pelear un lugar, Vecino enfatizó que “es una decisión difícil para el entrenador dejar afuera a tres compañeros pero es algo que se sabía de antemano y con el grupo más reducido por ahí te permite trabajar de otra manera”.
En su visión previa al Mundial la cancha va a marcar hasta donde podemos llegar. “Tenemos que ir con humildad y estamos en condiciones de llegar lejos. En un Mundial todos los rivales son difíciles y no hay que subestimarlos. En este momento, los históricos como España, Brasil y Alemania pueden ser los que terminen llevándose el título”.
Por último, destacó que escuchar a Diego Forlán, Diego Lugano y otros emblemas de la camada uruguaya que defendieron a la celeste en Mundiales, para él significa que “son referentes que dejaron su huella y siempre es bueno sentir sus palabras de aliento y recibir sus consejos”.
(Por Rafael Castillo)
