Gabriel Peluffo, cantante de Buitres y ex Los Estómagos, publicó a fines del año pasado De barro y asfalto [Bizarro, 2017], un álbum en el que se dio el gusto de versionar un repertorio de tangos clásicos, algunos más inadvertidos pero todos de profunda calidad poética y musical.
En diálogo con Aldo Silva en Fuentes Confiables remarcó que «pese a llevar más de 30 años en el mundo del rock, sus primeros acercamientos a la música fueron de la mano del tango, y su influencia permeó buena parte de su obra como compositor».
El próximo 4 de agosto presentará en La Trastienda Samsung las canciones de este disco, y repasará algunas piezas que le gusta cantar. «El tango me hizo mucho bien. Gracias al tango que escuché en mi casa aprendí muchísimo de música, aprendí muchísimo a cantar, aprendí muchísimo de poesía. Desarrollé una sensibilidad gracias a eso. Tengo más que agradecimiento para el tango. Al tango, a los libros, al cine, a todo lo que en mi casa se dio. De eso uno está eternamente agradecido.»
Explicó que «el bandoneón cambia sustancialmente las versiones y la interpretación. Fui descubriendo la experiencia de cantar con distintos instrumentos en vivo».
El sábado lo acompañan Julio Cobelli y en el bandoneón Nestor Vaz. «No son meros acompañantes, se han metido en el show y hacen aportes permanentes».
Aquí la entrevista completa en Universal:
