Una investigación, llamada Decreases in Psychological Well-Being Among American Adolescents After 2012 and Links to Screen Time During the Rise of Smartphone Technology, logró encontrarse con que desde 2012, los chicos de entre 13 y 18 años se consideran cada vez más infelices.

En simultáneo, su bienestar mental ha ido disminuyendo con el paso del tiempo y, en los últimos cinco años, bajó de una media del 2,06 al 2,00 sobre una escala de tres puntos.

Estos resultados fueron, principalmente, atribuidos a las nuevas tecnologías, ya que el uso de smartphones y redes sociales ha ido en aumento en los últimos tiempos entre los más jóvenes.