Ancap informó que este domingo quedó reparado el manguerote roto que provocó un derrame de hicrocarburo en la zona de la Boya Petrolera, y anunció que este mismo lunes comienza su sustitución. En la costa en tanto, concluyó la tarea de limpieza en una extensión de 2 kilómetros.
En las últimas horas de este domingo, Ancap confirmó que concluyó la reparación del manguerote de la Boya Petrolera de José Ignacio que había sufrido una rotura provocando una pérdida de crudo “intermitente”, según se constató a media mañana del sábado.
Por otra parte, anunció que este lunes 10 de diciembre se procederá a sustituirlo en su totalidad para evitar futuras contingencias como la ocurrida en los últimos días, y que provocó un derrame de crudo cuya cantidad no pudo ser estimada, aunque fue calificada de “menor”.
Durante la jornada del domingo, varias cuadrillas de distintas instituciones públicas procedieron a realizar la limpieza de las “trazas” de hidrocarburo sobre la costa. El trabajo se realizó sobre una extensión de 2.000 metros, entre los kilómetros 177 y 179 de la Ruta 10.
En tanto este lunes, se realizará una nueva recorrida por las playas para verificar que la zona esté totalmente libre de hidrocarburos. Además, personal especializado de Ancap realizó una inspección submarina en la boya y pruebas de presión, no constatándose ningún tipo de falla.
El vicepresidente de Ancap, Juan Carlos Herrera y el gerente general, Ignacio Horvath, concurrieron a la zona para participar de una reunión de planificación de las acciones a llevar adelante por parte del equipo de trabajo integrado por Ancap, la Intendencia de Maldonado, Prefectura y el Cecoed.Trazas de hidrocarburos en la costa, que ya fueron removidas este domingo.
Cabe recordar que, el derrame se constató durante una inspección de rutina realizada la mañana del sábado último por parte de la tripulación del “Ancap VII”, previa a la descarga de un buque petrolero. Inmediatamente se constató que un manguerote flotante tenía una rotura.
Luego de la última descarga de petróleo a fines de noviembre, se registraron condiciones climáticas adversas y fuertes tormentas con olas de hasta 9 metros de altura, lo que habría ocasionado la avería. Por el momento no se ha informado que se haya producido algún impacto negativo en la zona.
