Óscar Bottinelli, en el espacio de Factum «Elecciones en la Memoria» en Fuentes Confiables, habló sobre la relación de Jorge Batlle y Julio María Sanguinetti.
Contó que «Jorge Batlle llega al liderazgo rodeado de los ‘grandes barones’ y allí aparece alguna figura joven como Julio María Sanguinetti, quien entra al Parlamento en 1962 y sería una de las ‘espadas’ de Batlle».
Expresó que «Sanguinetti fue ministro de Industria y Comercio, y en el Gobierno que se inaugura en 1971 de Bordaberry, también la 15 participa y uno de sus ministros es Sanguinetti como ministro de Educación y Cultura. Esto le daba un peso singular»
Bottinelli explicó que «durante el período militar juega mucho que era un hombre con muchas relaciones militares y establece mucho diálogo con ello, trabajando muy temprano, en formas de salidas de la dictadura a través de la negociación y diálogo».
Comentó que luego de la dictadura, «si Sanguinetti iba a ser el jefe de Gobierno, Batlle se sentía el rey, pero claramente se veía el rol que cada uno se asignaba».
«Batlle y Sanguinetti puede haber sido una lucha de liderazgo, personal y de celos pero en realidad escondía una fuerte diferencia conceptual ideológica, que en Europa se hubiera expresado en dos partidos diferentes».