Claudia, la mamá del delantero, que llegó a Mendoza para el velorio y para llevar el cuerpo de su hijo a Uruguay, le apunto con todo a José Mansur.

En medio del dolor y la tristeza por el fallecimiento de su hijo, Claudia, la madre de Santiago García, brindó una breve rueda de prensa en Mendoza y fue lapidaria con José Mansur, presidente de Godoy Cruz. Su primera frase, firme y con la voz por momentos entrecortada, fue el comienzo de su durísimo testimonio.

“Este señor, que no se cansó de despreciarlo, manosearlo y humillarlo, nunca me contestó. Estoy acá porque todos mis amigos y mi familia me permitieron llegar a Mendoza a buscar el cuerpo de mi hijo. Y este señor está pasando sus vacaciones, muy merecidas, pero aunque sea me hubiera dado las condolencias. Soy uruguaya, tengo educación y se dan las condolencias, ni siquiera eso hizo”.

“Además -agregó-, quería aclarar que cuando el señor Mansur dijo que (el Morro) era un líder negativo para el club, que no había dado nada, debería haberlo.

Llegada desde Uruguay tras conocerse el fallecimiento de su hijo de 30 años, Claudia apuntó directamente contra José Mansur, que había colgado al delantero. El presidente del club emitió un llamativo comunicado el domingo por la mañana.

¿Cómo fueron estos últimos días y cuándo se comunicó con Santiago?

El lunes fue mi cumpleaños y me dijo que se iba para casa, que se volvía para Uruguay, que lo había acordado con el señor Mansur. Pero después se arrepintió, como siempre se arrepiente, y le pidió el otro 50 por ciento del pase que estaba gestionado por un señor que se llama Daniel Fonseca, y que a mi hijo y a la familia les debe un montón de dólares de las transferencias. El señor Mansur sabe perfectamente esto, sabía que Santiago estaba desesperado por irse.

¿Eso lo tenía muy mal?

Lo tenía muy mal. Somos de una familia muy unida. Yo me levanto todos los días a las 5 de la mañana, voy a trabajar, trabajo salvando vidas porque soy enfermera, y resulta que en esta pandemia no nos pudimos cruzar nunca a Buenos Aires ni llegar a Mendoza. Y la hija de Santiago, tampoco. Mi madre tiene 87 años y no lo cremé para llevarle el cuerpo de su nieto y que se pueda despedir. Fue una gran persona, un tipo humilde, y la equivocación que tuvo fue no sacarse la gente que es corrupta, que no tiene códigos.

(A Mansur) Le faltó hidalguía para manejar la situación de depresión de una persona que estaba atravesando estos momentos, sinceridad a la hora de hablar y a la hora de negociar, donde el peso de Santiago aumentaba a medida que firmara un contrato o no. Santiago estaba gordo porque estaba depresivo, no tenía entusiasmo por lo que había, estaba solo y este señor volvió a jugar con él. Pero soy una mujer fuerte y voy a vivir todos lo días con mi nieta, que se quedó sin su padre, diciéndole que este señor debe tener más respeto por el otro, que el fútbol es precioso pero no es sólo dinero. Mi hijo hizo muchos amigos que lo lloraron y lo van a extrañar. A veces, cuando se habla de la depresión, no es una cuestión de que uno tenga que decir ‘no, no, está triste’…. Santiago estaba deprimido, tratado, y él como presidente del club debería haber tomado las cosas de otra manera, haber hablado de otra manera, haberse acordado. Según él, Santiago pasó sin pena ni gloria por acá, pero Santiago se enamoró del club, de los hinchas y de la ciudad. Y no se dejó llevar por ningún negociado. Si no te acercás al gran negocio de fútbol, quedás relegado como dijo este señor, que manifestó que lo iba a hacer correr por el pasto seis meses. Es lapidario para un jugador, para su estima. Pero como este señor debe ser estanciero o tener un negocio donde lo que no marcha se tira, a mi hijo lo quiso tirar. Pero estoy yo y está mi nieta y le vamos a hacer acordar toda la vida que estas cosas no se hacen.

Fuente: Martín Riveiro/La Oral Deportiva