El técnico español envuelto en la polémica, tras el beso con la jugadora Jenni Hermoso renunció formalmente a su cargo en la selección española y a la vicepresidencia de la UEFA.
La futbolista española formalizó la denuncia contra el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) poco más de una semana después de que el ministerio fiscal le ofreciera la oportunidad de tomar acciones legales contra Rubiales.
En una carta, el ahora ex entrenador asegura que tras lo sucedido “es evidente que no podrá volver a su cargo”. “Insistir en quedarme a la espera y aferrarme a ello no va a contribuir en nada positivo, ni a la Federación, ni al fútbol español”, indica en la misiva.
Además pide disculpas a su familia, sus hijas y todas las personas que se vieron involucradas en lo que asegura es una “persecución desmedida”.