Este miércoles, por 61 votos contra 20, el Senado de Brasil aprobó la destitución de Dilma Rousseff (Partido de los Trabajadores). «No me gustaría estar en el lugar de los que se juzgan vencedores. La historia será implacable con ellos», dijo la ahora exmandataria tras la resolución de la cámara alta.
Por lo tanto, Michel Temer (Partido del Movimiento Democrático Brasileño) deja ser presidente interino para quedar confirmado en el cargo hasta el 1° de enero de 2019.
Por otra parte, el Senado de Brasil decidió mantener los derechos políticos a Dilma Rousseff, a pesar de la destitución. De esta forma, la mandataria podrá volver a ocupar un cargo público y a presentarse en elecciones.
En la votación, 42 senadores se inclinaron por inhabilitar a Rousseff, 36 votaron a favor de mantenerle los derechos y 3 se abstuvieron, por lo que no se alcanzó los dos tercios (54 votos) de la cámara alta necesarios para aprobar este tipo de mociones.
En su twitter, Rousseff afirmó: «No me gustaría estar en el lugar de los que se juzgan vencedores. La historia será implacable con ellos», citando así una frase del libro O povo brasileiro del autor Darcy Ribeiro.
Posteriormente, Rousseff emitió un discurso en el que opinó una vez más que el Senado de Brasil consumó «un golpe de Estado» y aseguró: «Volveremos, volveremos para continuar».
FOTO: Twitter Rousseff