El intendente Enrique Antía aseguró ayer que a pesar de haber recibido un millón de dólares de ayuda del gobierno central para reparar los daños del temporal, la comuna deberá invertir entre 45 y 50 millones de pesos para terminar la tarea. El dinero del gobierno “es buena plata”, pero que aún no sabe cómo se expresará ese apoyo y no se puede esperar, señaló.
Para costear los gastos el jerarca sostuvo que habrá que “rascar las latas posibles”, difiriendo pagos, pero sin tomar crédito porque la comuna está topeada “y no hay de donde sacar”. Reparar las bajadas a la playa, a tan pocos días del comienzo de la temporada, es vital, afirmó.
El intendente reiteró la necesidad de que Uruguay cuente a nivel nacional con un fondo especial para afrontar este tipo de contingencias: “Las veces que aparecen estos fenómenos es frecuente, el clima cambió y tiene que haber un fondo porque las necesidades siempre están a la orden”, indicó.
La actual administración ya había dispuesto un fondo especial a estos efectos, pero todo fue gastado tras el primero de los tres fuertes temporales que azotaron el departamento. En esa oportunidad, la reparación de la caminería rural ocasionó gastos millonarios.