Susana Giménez cerró un gran año. Y para el programa final invitó nada menos que a Moria Casán. La diva acompañó a su gran amiga en el sketch de «La empleada pública», también protagonizado por Antonio Gasalla. Y, fiel a su estilo, no se guardó nada.
Pero lejos de captar la atención por su famosa «lengua karateka», la jurado del Bailando 2016 causó sensación por su estilizada figura. Enfundada en una campera y un pantalón de cuero, recibió de entrada un elogio de la conductora: «Qué flaca que estás, ¡estás esculpida!».
Moria, que rápidamente se sacó la campera y dejó ver su escote, aseguró que el doctor Mühlberger le «hizo el amor en la camilla». «Me penetró con el láser…», bromeó, al explicar cómo hizo para recuperar su figura. Y agregó: «No me peso, mi balanza es interna. Me doy cuenta que estoy más flaca por la ropa. Pero no bajé de peso por una presión social».
Luego, la diva se refirió al hombre, el abogado Juan Pablo Fioribello, que la acompañó a la fiesta de América y todos señalaron como su nueva pareja. «No estoy de novia, tengo amigos. A mí me gusta tener harén… Salgo con varios», sostuvo, entre risas.
También se despegó del kirchnerismo, que apoyó en más de una ocasión. «Tenía simpatía por (Daniel) Scioli, pero nunca fui K», afirmó.
