El área de Emergencia Pediátrica del Hospital Pereira Rossell mejoró su infraestructura, equipamiento y logística, lo cual redundará en una mayor eficiencia y calidad de atención. Utiliza un sistema innovador de clasificación de pacientes, más ágil, que pondera según nivel de gravedad. La inversión requiere ocho millones de pesos y, luego de inauguradas las obras, se continuará mejorando el resto de los pisos del centro.

Las mejoras en Emergencia Pediátrica incluyen la remodelación completa de la cabina de registro de usuarios, sala de espera de pretriage (preclasificación), dos consultorios de triage (con implementación de software), otro lugar de espera de pacientes catalogados de “nivel 3”, tres consultorios para los de “niveles 4 y 5” (incluye enfermería y sala de espera), área de personas que aguardan especialistas. Todos esos espacios cuentan con equipos de aire acondicionado.

También se remodelan áreas de enfermería y de observación con dos aislamientos, consultorios de atención rápida y de traumatología, tres unidades con aislamiento visual, se colocan nuevas terminales de aire-oxígeno para terapia de alto flujo en área de observación, en un área especial para enfermería con el correspondiente equipamiento, nuevas terminales de computadoras y la correspondiente instalación y puesta en funcionamiento de la historia clínica “Geosalud”.

La inversión en estas mejoras se estima en más de seis millones de pesos.

También se realizaron trabajos en el primer piso en cuidados moderados, para construir nueve salas de internación con dos camas cada una y dos salas individuales con nuevas camas, calefacción y baño privado, sala de procedimientos equipada con carro de reanimación y demás materiales, otra de preparación de la medicación y una tercera de estar para personal médico, cocina, lavadero y ducheros para padres también equipados con todo lo necesario.

En este caso la inversión alcanzó los dos millones de pesos en obras, a lo que debe sumarse el equipamiento.

La Presidenta de ASSE, Alicia Muñiz aclaró que las obras van más allá de la infraestructura y el equipamiento de vanguardia, puesto que incluye cambios en la organización del servicio. El proceso comienza cuando el niño o niña llega a la puerta de emergencia y en pocos minutos se preclasifica, ingresando sus datos a un sistema de clasificación por patologías y por gravedad del caso. Luego, se deriva cada paciente al área correspondiente.

Ese sistema de clasificación, de origen español, solo se utiliza en dos países de América Latina y agiliza los tiempos de espera, priorizando los casos más graves y urgentes. También se dispusieron mejoras en la ubicación de los consultorios para tener una atención más efectiva.

Asimismo, las mejoras en instalaciones incluyen cambios para asegurar el confort de las habitaciones, con dos camas, baño privado y televisión. “Estamos preparados para enfrentar el invierno con mejores condiciones”, aseguró Muñiz.

Por su parte, el director del Centro Hospitalario Pereira Rossell, Federico Eguren, indicó que esto permite que el equipo de salud trabaje con las condiciones que merece y por lo tanto optimizar la atención hacia los niños.

Actualmente se atienden unos 280 niños y niñas en este hospital pediátrico, 10% de los cuales ingresa a cuidados moderados. Aún no se alcanzó el pico máximo, que seguramente se estén dando en las próximas semanas cuando haya comenzado el invierno. “Vamos a atender a todos los que consulten, como siempre”.

Eguren agregó que en el último año se instalaron nuevas camas de tratamiento intensivo e intermedio y se han mejorado las instalaciones. Estas obran son el ejemplo para seguir con todos los pisos del Hospital Pediátrico. “Queremos dotar de la mejor calidad asistencial el hospital, que es lo que merecen nuestros niños”, expresó.

En relación al Sistema de Atención Respiratoria, se registró un aumento de número de casos pero no son de gravedad. A partir de la implementación de Oxigenoterapia de Alto Flujo, se logró que menos niños ingresaran al centro de tratamiento intensivo, el que actualmente cuenta con 20 camas libres, lo cual es “inédito” en la historia del centro de salud.

Aquí las declaraciones de la Dra. Muñiz: