Un detallado informe de Andrés Rega nos permite entender la convocatoria a votar el próximo domingo por parte del gobierno de Maduro. Mientras la oposición convoca a la abstención y Maduro llama a la reconciliación, se suspendieron todo tipo de marchas pero se reitera el paro general.
Las repercusiones internacionales son cada vez más intensas. USA, la OEA, el MERCOSUR todos hablan de no intervenir, pero todos opinan y anuncian posibles medidas.
«El 30-J va a ocurrir un milagro más de la revolución». Nicolás Maduro ha insistido en invocar a la metafísica para explicar cómo llevará adelante la elección de la Asamblea Nacional Constituyente, prevista para el domingo, pese a contar con el rechazo del 80% del país.
“Se prohíbe en todo el territorio nacional las reuniones y manifestaciones públicas, concentraciones de personas y cualquier otro acto similar, que puedan perturbar o afectar el normal desarrollo del proceso electoral”, dijo el ministro de Interior, el General Néstor Reverol, un día antes de una gran marcha de la oposición en Caracas.
Quien “organice, sostenga o instigue” acciones que interfieran con “la organización y funcionamiento del servicio electoral” será “penado con prisión de cinco a diez años”, señaló igualmente el ministro en rueda de prensa, citando un decreto presidencial.
Reverol garantizó la seguridad del proceso durante una comparecencia con la presidenta del poder electoral, Tibisay Lucena; el ministro de Defensa, general Vladimir Padrino, y el jefe del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada, almirante Remigio Ceballos.
En respuesta, la oposición ha anunciado un “boicot” contra las votaciones, en medio de las protestas que lleva a cabo desde hace cuatro meses y que dejan al menos 106 muertos.Tras el anuncio sobre la prohibición a las manifestaciones, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, planteó a la oposición iniciar un diálogo previo a las votaciones del domingo; sin embargo, ratificó que su proyecto no tiene reversa.
“Propongo a la oposición política venezolana que abandone el camino insurreccional (…) y que instalemos en las próximas horas, antes de la elección e instalación de la Asamblea Nacional Constituyente, una mesa de diálogo”, dijo Maduro en el cierre de campaña de la iniciativa.
“A la oposición le conviene aceptar esta propuesta”, añadió Maduro, ante miles de simpatizantes en la avenida Bolívar, en el centro de Caracas.
El mandatario indicó que si sus adversarios no aceptan, les propondrá a los constituyentes que convoquen, “de manera obligatoria, un diálogo nacional de paz con una ley constitucional”.