Sufrida pero enorme victoria de Santiago Urrutia a bordo del Dallara/Mazda del equipo Belardi en el óvalo de Gateway lo que constituyó un hecho histórico: el coloniense se transformó en el primer piloto uruguayo en ganar en una de estas pistas tan características del automovilismo de EEUU.
Tras largar desde el segundo lugar, Santiago Urrutia se tomó todo con mucha calma hasta lograr que el auto estuviera en buena temperatura. Es más, la carrera ya tuvo un inicio que presagiaba lo que vendría después: muchos accidentes y con ello, las neutralizaciones que fueron las protagonistas de la carrera 15 de la IndyLights.
Cuando la carrera volvió a ser tal, el uruguayo quedó tercero y a la inversa, Kyle Kaiser (Juncos) líder del campeonato, saltaba del quinto al segundo lugar y se ponía al ataque ante el poleman y quien comandaba la competencia, el colombiano Juan Piedrahita (Pelfrey).
Antes de mitad de carrera, Urrutia ya dio cuenta de Kaiser y a mitad de carrera se fue con todo a buscar a Piedrahita a quien también superó y tomó una diferencia que osciló entre 1,2 y 1,5 al frente de la carrera. Todo estaba dominado.
A falta de 12 vueltas un triple accidente cambia el panorama. Las Autoridades deciden parar con Bandera Roja la carrera para retirar los autos y los pedazos esparcidos en la pista. En ese momento, Urrutia lideraba, Piedrahita estaba cerca pero sin inquietar y Kaiser se debatía para sostener a duras penas el sexto lugar. Un resultado casi, casi, soñado.
La carrera estuvo detenido casi 15 minutos y al reanudarse, pasó de todo. Urrutia con el auto frío no arriesgó y Piedrahita lo superó en tanto nuevamente se sucedían accidentes que le permitían a Kaiser -sin proponérselo- avanzar al cuarto lugar.
Tras la última neutralización y con solo tres giros para completar los 75 previstos, Santiago Urrutia se juega todo lo que le quedaba. Va por dentro con agresividad, rueda a rueda con el colombiano Piedrahita que resiste durante una vuelta hasta que finalmente y a falta de una vuelta, Santiago Urrutia logra doblegarlo y ganar por primera vez en el óvalo, una asignatura pendiente para el gran piloto compatriota.
Tras Urrutia y Piedrahita arribó Colton Herta (Andretti) y de manera increible Kyle Kaiser cuarto en un cierre de carrera con apenas 8 autos en pista y muchos monoplazas destrozados.
A falta de una carrera, el resultado lo consagra a Kaiser como virtual campeón. Santiago Urrutia le descontó 11 puntos y quedó a 31 del líder con 33 en juego. El tema es que si Kaiser en Watkins Glen el próximo domingo finaliza último, igualmente embolsa 6 puntos. Entonces y aunque Urrutia gane los 33 puntos, no le daría para ser campeón. De la única forma que llegaría al título es ganando los 33 en juego y que Kaiser no largue la última competencia del año o que durante el transcurso de la misma, sea excluido por alguna incidencia antideportiva.
Dos escenarios absolutamente improbables.
Sin embargo, hay que mirar la parte llena del vaso. Santiago Urrutia ganó en el óvalo y tomó protagonismo en el cierre del año justo en momentos que negocia su pase a lo máximo: la IndyCar 2018.
Sería fantástico cerrar el año el próximo 3 de setiembre venciendo en la carrera 16 -última- de la temporada 2017 de la IndyLights.
Mario Rosa
Secretaría de Comunicación
