El responsable se llamaba Devin Patrick Kelley, tenía 26 años y formó parte de la Fuerza Aérea norteamericana hasta 2013. Luego fue docente en estudio bíblicos.

Fuentes policiales identificaron al tirador de Texas como Devin Patrick Kelley, un integrante de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos, de 26 años.

El joven, que trabajaba como profesor en un estudio bíblico, ingresó , pasadas las 11.30 a la Primera Iglesia Bautista de Sutherland Springs, vestido con ropa de combate y abrió fuego contra las personas presentes.

Kelley, de New Braunfels, un suburbio de San Antonio, murió luego de una breve persecución, de acuerdo a las mismas fuentes policiales. Sin embargo, no detallaron si fue abatido o si se suicidó.

Según un testigo, Devin Patrick Kelley ingresó a la iglesia y abrió fuego contra los que se hallaban dentro, provocando la muerte de 27 personas.

Tras lo sucedido, la policía de San Antonio allanó la casa de Kelley, con unidades de K9 y escuadrones anti-bomba.

Varios testigos declararon que el hombre abrió fuego contra los fieles aparentemente con un rifle de asalto semiautomático, que permite disparar ráfagas de forma continuada. El pastor de la iglesia, Frank Pomeroy, dijo a ABC news que su hija, de 14 años, estaba entre los fallecidos.

Se desconocen los motivos que habrían llevado a Kelley, que vive en un suburbio cerca de San Antonio, a cometer la masacre en Sutherland Spring y tampoco se sabe si estaba ligado a algún grupo terrorista.  Aparentemente había subido a Facebook hace unos días una foto suya con un rifle semiautomático.

José González, un cajero de una estación de servicio frente al templo dijo a la CNN que escuchó unos 20 disparos “en rápida sucesión mientras se realizaba la misa”. “Estamos en shock”, agregó.

​El hecho alteró la calma de esa pequeña comunidad rural, de mayoría de población anglosajona y con un 20% de origen latino. “Es gente tranquila y buena, que vive del campo y la ganadería, o trabaja en el sector de petróleo y energía”, dijo González.