El Tanque Sisley venció 3 a 2 a Sud América en un vibrante encuentro por la ida de la permanencia, pero la IASA hizo un gol en la hora que le dio vida

Si una final por un campeonato suele ser reñida y emocionante, y allí terminan primando más los factores anímicos que los futbolísticos… que decir que un repechaje por no descender. Como lo prometía, el choque de esta tarde tuvo mucho más emotividad que fútbol. Y terminó ganando el que menos propuso, pero que mejor supo imponerse en los momentos cúlmines, mucho más por ganas y capacidad de superar la adversidad que por habilidad.

El Tanque estuvo claro de cara al arco rival cuando tuvo chances, y se las arregló para, pese a ser dominado casi todo el tiempo, no permitir que su rival convierta, al menos la mayoría de las veces. Obviamente la suerte también estuvo de lado del fusionado, por ejemplo cuando Ruben Bentancourt estrelló dos remates en el palo o cuando algún defensor o el arquero Sebastián Britos salvaron la tarde con un cierre.

Sud América, por su parte, salió a proponer. Con un Mariano Miño exquisito con la pelota y Bentancourt muy movedizo en ataque, los naranjas tomaron las riendas del juego desde el comienzo. No obstante, el fuisonado terminó bien un contragolpe y Lucas Tamareo puso en ventaja a su equipo cuando el partido recién estaba empezando.

La IASA mantuvo su idea, pero careció de profundidad y efectividad, y terminó yéndose al descanso con una derrota que no se condecía con lo visto en el campo, pero que respondía a la efectividad de los locales. Recién comenzado el complemento, Bentancourt abrió el marcador de penal, pero, siete minutos después, Ademar Martínez empató por la misma vía. Además del gol, el volante fue uno de los mejores jugadores de la cancha.

Sabiendo que la derrota no era negocio, el visitante salió aún con más decisión en busca del empate, pero volvió a encontrarse con un sólido rival, que casi no lo dejó llegar a definir. Para colmo de Sud América, Juan Cruz Mascia puso el tercero cuando el partido se moría. El tanto dejaba muy complicado al equipo de Gustavo Bueno, que salió desesperado y consiguió descontar en una de las última por medio de Rodrigo Pollero.

Pese a que el resultado no fue favorable, la IASA dejó la sensación de que puede dar vuelta el marcador. Eso si, deberá superar a un equipo que se cierra muy bien atrás y, sobre todo, su propia falta de definición. El partido de vuelta se jugará el miércoles a la hora 17 en el Parque Viera.

(Por Fernando Penadés)