A partir de este miércoles, los usuarios y médicos podrán acceder, a través de las tabletas del Plan Ibirapitá, al formato digital del Carné del Adulto Mayor (CAM), que se entregaba hasta ahora en papel y que contiene el resumen del estado general de salud de las personas mayores de 65 años.
Es una primera etapa destinada a los casi 400.000 usuarios que poseen la tableta digital, explicó Basso, pero está previsto que el resto de los adultos mayores también puedan acceder a su información personal digitalizada, ingresando en un sitio web del Estado que se informará debidamente.
El CAM, que no tiene costos para los usuarios ni para las instituciones de salud, tiene como objetivo facilitar información específica y diferenciada y contribuir a la atención y calidad de vida de los mayores. Los datos que contiene deben actualizarse cada año y cada vez que exista un cambio importante en la situación de la persona.
La versión digital permitirá prescindir del formato papel y ahorrar recursos. Se desarrolla un sistema amigable, más ágil en el llenado.
A su vez, proporciona información para el diseño y la planificación de políticas públicas y permite elaborar informes desagregados por prestadores en cuanto a problemas principales y dimensiones de la fragilidad en mayores según la institución, con lo cual los prestadores podrán desarrollar estrategias focalizadas en los grupos más vulnerables.