Al finalizar el Consejo de Ministros del lunes 5 en la Torre Ejecutiva, el ministro de Salud Pública, Jorge Basso, informó sobre el trabajo en el Hospital de Ojos José Martí, ubicado en el predio del hospital Saint Bois, en Montevideo, donde se atiende a personas que padecen patologías oftalmológicas. La cirugía de cataratas es la más frecuente.
Desde su creación, en 2008, el hospital totalizó 81.000 cirugías de todo tipo. Basso valoró que este servicio revirtiera una deuda social histórica, sobre todo del sector público, respecto a personas que en muchos casos se encuentran en los segmentos más vulnerables de la sociedad. “De esta forma, se satisface un derecho humano fundamental”, dijo.
Destacó, además, que este servicio es referencia para los profesionales, ya que la Escuela de Graduados de la Facultad de Medicina lo definió como centro de formación en el que se reciben nuevos oftalmólogos. Actualmente, trabajan en el hospital más de 40 médicos uruguayos y seis cubanos.
El ministro explicó que, para eliminar las listas de espera y promover un diagnóstico precoz, varios equipos del centro realizaron pesquisas en diferentes departamentos, tanto en el sector público como en el privado. Las brigadas ya atendieron en Mercedes, Melo y Artigas.
Paro de anestésico-quirúrgicos
Consultado sobre el paro de los profesionales anestésico-quirúrgicos previsto, por 72 horas, y sobre la posibilidad de declarar la esencialidad del servicio, Basso dijo que desde el Gobierno se monitorea la situación en forma pormenorizada en cada uno de los 43 prestadores de salud y recordó que no se trata del sector más afectado en lo que refiere a las retribuciones.
Explicó que, en otras ocasiones, en las que la medida de paro fue menos prolongada, la afectación fue diferente en distintas instituciones. Señaló, por ejemplo, que los institutos de medicina altamente especializada (IMAE) no se vieron afectados y que los seguros privados tampoco, lo que consideró un indicador de que este tipo de medidas suelen repercutir con mayor intensidad en los sectores más vulnerables. Dijo que le preocupan los casos de pacientes que deben reagendarse pese a que sus cirugías estaban coordinadas desde hace meses.
Basso insistió en que la vía de resolución sea el diálogo. “Ninguna situación, por más compleja que sea, debe determinar que los sectores más vulnerables sufran las consecuencias. Nos genera la necesidad, como país, de resolverlo en los ámbitos que corresponden para no llegar a medidas fuertes para quienes requieren de esos servicios”, expresó. Además, aclaró que las intervenciones de urgencia y las oncológicas se mantienen.