Milagro Pau, responsable de la Secretaría de Género, Equidad y Diversidad del PIT-CNT, estuvo en After Office y habló sobre la marcha del #8M, el trabajo de la central sindical relativo a la mujer y los objetivos a lograr.

«La Secretaría de Género hizo 16 talleres en 2018 sobre género, discriminación y violencia, acoso callejero y acoso en el trabajo. Nuestro objetivo como Secretaría es sensibilizar, que aprendan sobre el tema, y que se internalicen con el movimiento sindical», dijo Pau sobre el trabajo de la central sindical en el sector rural.

A pesar de los avances que han tenido en la concientización sobre la igualdad de género, afirmó que deben trabajar para preparar dirigentes «reales» y no dirigentes sindicales «machistas» o «sectoriales». También agregó que «hay compañeros que antes era impensable, hace diez años, escuchar de su boca ciertas palabras. Eso es el avance que hemos tenido. ¿Que estamos bien? No estamos bien. ¿Que la central sindical es igualitaria y equitativa? No, no lo es. No nos mintamos, es lindo decirlo, está bueno en los discursos, pero no somos pre electorales por lo tanto podemos decir las cosas cómo son».

La Secretaría de Género del PIT-CNT busca preparar compañeras que no tengan que hablar solamente de género, explicó la sindicalista, sino que «hablen de política internacional y política nacional».

Ante la participación masculina en el feminismo, Pau opinó: «para nosotros no existen cambios culturales si no los hacemos entre todos. Somos el 50% del mundo y del Uruguay, pero el otro 50% son varones, por lo tanto una lucha que llevamos a cabo solamente las mujeres y no logramos concientizar avanzar en cultura feminista a los varones, no vamos a lograr nada. Por eso apostamos a que la educación y los cambios culturales los debemos hacer entre todos».

La responsable de la Secretaría de Género catalogó de «muy machista» a la central sindical, entendiendo que para lograr un cambio «se necesita trabajar, educar, concientizar y discutir política». También agregó: «Estamos acostumbrados a que cualquier varón abre una asamblea y lo aplauden, en cambio si una mujer dice exactamente lo mismo no es tan importante».

En cuanto a las elecciones pasadas, Pau explicó que se hizo mucha campaña electoral sobre que el tercio de las listas estaba conformado por mujeres, pero «después se les obliga a renunciar porque el suplente era varón». También explicó que para las siguientes elecciones se hizo «una carta con el compromiso para el próximo gobierno, gane el color que gane, sobre los avances que hemos tenido a nivel legislativo y los debes que aun tenemos en la aplicación de políticas de género en nuestro país».

Para lograr un cambio en la reproducción del machismo, Milagro Pau, dijo que «estos patrones se rompen con tolerancia, con comprensión, con una convivencia plena. La tolerancia y el aprender a respetar las diferencias, estamos acostumbrados a que, el que piensa diferente a mi, no está en mis filas y no es así. Si nosotros reproducimos la violencia que de alguna manera estamos criticando, eso no es feminismo; como lo dijimos y declaramos, como Intersocial Feminista, frente a los problemas que se dieron en la marcha. Las feministas rechazamos ese tipo de actitud, porque el feminismo no es eso», a lo que le añadió, «hay que ser agresivas en la acción, pero no violentas».

«La cuota no es un fin, es un medio», opinó Pau. Basándose en estudios sociológicos afirmó que las mujeres están más preparadas, tienen más currícula universitaria y mucho más nivel cultural. A pesar de esto entiende que «todavía hay lugares a los que las mujeres no accedemos por la maternidad, por la responsabilidad familiar, que hoy por hoy los varones no saben asumir como su responsabilidad también. Cuando lleguemos a esa utopía que vamos a llegar, con seguridad no vamos a hablar de cuota».