El Poder Ejecutivo autorizó la creación de un fideicomiso de US$ 28 millones para mejorar la situación financiera de Casa de Galicia, aunque fueron planteadas condiciones. La Asociación de Funcionarios de Casa de Galicia y el Sindicato Médico del Uruguay (SMU) definieron 74 puntos que la empresa deberá cumplir, como parte de la reestructura. Sin este camino no será viable continuar con los servicios, según asegura el SMU.
“Sin dudas que hay un problema de gestión, desde hace mucho tiempo”, aseguró el presidente del sindicato, Gustavo Grecco. Ahora se pondrá en marcha una comisión de seguimiento para el control de ahorro, previendo que Casa de Galicia no vuelva a sufrir el “período de crisis” en el que aún está involucrado. Grecco, agregó: “no queremos que se inyecte dinero sin tener una contrapartida de una reestructura que la haga viable”.
Dijo que se debe tener la capacidad de controlar y monitorear la situación para que de este modo, estén las garantías de que los fondos destinados se utilicen para lo que fueron previstos. El objetivo es mitigar la opción de que cumplan “otro cometido que no sea darle viabilidad a la institución”, señaló Grecco.
La medida que llevó al acuerdo del fideicomiso afectará al personal médico, no médico y procesos internos, según explicó Soledad Iglesias, integrante de la Unidad de Negociación del SMU. Es por eso que requirió el aval de los gremios.
“Tenemos cientos de fuentes de trabajo en juego y una institucion emblematica en el riesgo de cerrar”, insistió Grecco. Se requirió el aval de los gremios, quienes solicitaron que fueran incluidos reclamos salariales; el personal médico no cobra salario vacacional desde 2013 y tiene atrasos en remuneraciones desde 2017.
En cuanto a suministros para clientes, Iglesias aseguró que pese a los problemas financieros “no hay ningún impacto asistencial”. Aunque reconoció que la cifra de usuarios es “reducida”. La infraestructura de la empresa tiene capacidad para 120.000 personas, pero actualmente hay 46.000 clientes. “No queremos que se vea deteriorada la asistencia al usuario”, coincidió Grecco.
Iglesias añadió: “tenemos un convencimiento en cuanto a la calidad de asistencia del personal médico y no médico que Casa de Galicia brinda. Es una de sus principales fortalezas”. Esperan que cuando la reestructura se haga efectiva “se pueda obtener una ganancia de socios”. Es el segundo fideicomiso para la reestructura de Casa de Galicia, pero también empresas como La Española o Casmu ya han obtenido este tipo de acuerdo para mejorar la situación financiera.