El intendente departamental confirmó a 970 noticias que seis viviendas fueron afectadas parcialmente. Opinó: «parecía una zona de guerra».

Pereyra agregó que el lunes continuaran evaluando los daños que provocó la sudestada sucedida en el balneario Aguas Dulces. Admitió que no hay personas lesionadas porque se la afectación se dio sobre viviendas ocupadas en temporada alta.

Agregó que por más que algún propietario tome acciones legales contra la intendencia “no hay nada que hacer” porque  las construcciones estaban realizadas sobre espacios públicos, algo que está prohibido por ley.