Este domingo, el presidente de Bolivia, Evo Morales, renunció a su cargo ante la Asamblea General boliviana luego de que las Fuerzas Armadas de ese país sugirieran su dimisión. De taquito a la mañana habló con la periodista boliviana Gabriela Weiss, de ChequeaBolivia, al respecto.
La renuncia de Evo Morales se dio luego de que la Organización de los Estados Americanos (OEA) hubiera detectado «serias irregularidades» en el acto electoral. En este marco, la población salió a las calles, y decenas de ministros y funcionarios fueron renunciando a sus cargos a lo largo del día.
En octubre, Morales, que ha estado en el poder desde el año 2006, había sido reelegido por cuarta vez en primera vuelta con el 47,08% de los votos y más de 10 puntos porcentuales por delante del candidato opositor y expresidente Carlos Mesa (36,51%), según el cómputo oficial. El recuento de votos, sin embargo, hizo que la oposición develara sus dudas sobre la veracidad del acto electoral y que llamara a celebrar nuevas elecciones. Fue así como muchos bolivianos se volcaron a las calles a pedir su renuncia.
Es que en febrero de 2016, el pueblo boliviano había votado «No» en referendo a otra reelección de Evo Morales. «El ‘no’ ganó por un 51%, por lo que él no debería haber estado en esa papeleta en estas elecciones. Sin embargo él obvió la opinión del pueblo y terminó estando en la papeleta, eso ya era ilegítimo», afirmó Weiss, quien ha estado trabajando en el chequeo de datos de estas elecciones a través de su trabajo en ChequeaBolivia, uno de los primeros proyectos de verificación de datos en Bolivia.
Weiss no ha podido asistir a su lugar de trabajo en los últimos días justamente por la situación que está atravesando el país. «Desde hace 20 días estamos con un paro cívico en el país, lo que significa que la gente se ha estado organizando y ha estado poniendo bloqueos en cada una de sus esquinas, entonces no se puede ir en auto a ningún lado. La cosa está bastante fuerte», dijo. «Incluso ahora salir a la calle podría ser algo peligroso. Hasta hoy fueron tres los muertos, dos en la provincia de Montero en Santa Cruz, y el miércoles de la semana pasada en Cochabamba hubo una muerte».
Ayer, miles de bolivianos festejaron su renuncia en plaza Murillo, donde se encuentra el Palacio Quemado, la vieja casa de gobierno en La Paz. Morales gobernó Bolivia casi 14 años, un récord en permanencia en el poder en Bolivia. En su dimisión, el ahora ex mandatario convocó nuevas elecciones y lamentó lo que calificó como un «golpe de Estado», y que el gobierno uruguayo, en la mañana del lunes, afirmó como tal.
«Ayer, antes de que él presentara su renuncia, se vio un informe preliminar de la auditoría que se estaba haciendo a las elecciones. En ese informe se evidenciaron varias irregularidades, lo que ya presenta un fraude, y la OEA lo admitió», aseguró la periodista. «No se ve un golpe de Estado, porque el golpe de Estado se daría por una entidad militar, lo que no ha sucedido».
«Anoche luego de la renuncia se dieron saqueos e incendios en la ciudad de La Paz, en Santa Cruz y en Cochabamba. Hoy está más tranquilo, pero está extraño, porque los bloqueos siguen. Se ha pedido a los ciudadanos que mantengan los bloqueos por dos días más hasta que se aclare lo de la Asamblea Legislativa. Es una situación extraña, sin embargo no han habido actos violentos en la jornada de lunes», dijo.
Sobre el paradero actual de Morales, Weiss comentó: «La última vez que se lo vio fue en Chimoré en el departamento de Cochabamba, donde se refugió, sin embargo todavía no se sabe si ha salido del país, o qué ha pasado».
