Se decidió modificar el criterio aplicado en vehículos decomisados, a partir de ahora se destruirá y fundirá aquellos que no sean retirados en un tiempo prudencial.

Los vehículos que hasta el momento pasaban a remate, serán reducidos a “chatarras” y luego el material irá a fundición que se realizará una vez al mes.

De lo producido por dicha fundición se recibirá materiales de hierro para el trabajo de Ingeniería de Tránsito, Obras y Acondicionamiento Urbano.

El director general de Tránsito y Transporte de la Intendencia de Canelones, Marcelo Metediera, explicó que en la primera etapa se sacaron de circulación un total de 1470 motos, 7 autos y un ómnibus.

Agregó que el propietario del vehículo tiene 30 días para retirarlo, de lo contrario se hace una comunicación en el diario oficial intimándolo. “Esto nos va a permitir cambiar la lógica de trabajo y poder sistematizar como lo venimos haciendo”, dijo Metediera.