Pese a que la Secretaría Nacional de Deporte y el Ministerio de Salud Pública dieron luz verde a contar con un 40% de aforo máximo permitido, a la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF), en el marco de sus torneos profesionales, la Segunda División por el momento no considera el regreso de público debido a tres cuestiones debidamente fundadas.

La primera es la decisión unánime que las 12 instituciones participantes votaron en el Consejo de Liga previo a iniciar el certamen, de disputar sin excepciones, todo el campeonato en el Estadio Charrúa, para evitar afección a la deportividad y que se celebrasen los partidos en igualdad de condiciones para todos.

Si esto se rompe, Racing que prescindió de jugar en el Roberto en la primera rueda con Uruguay Montevideo, tendría una desventaja natural para la segunda, a modo de ejemplo.

La segunda es uno de los puntos del reglamento especial Covid aprobado en Congreso para las temporadas 2020 y 2021, hasta tanto esté vigente el estado de emergencia sanitaria en el país, decretado por el Gobierno nacional el 13 de marzo de 2020.

En el mismo, el Estadio Charrúa fue eximido de tener el tejido reglamentario de un alto mínimo de 2.20 metros, según el artículo 84.1 del Reglamento General, sobre las condiciones de los campos de juego, mientras se disputasen partidos a puertas cerradas.

El tercer y último punto por su parte, es el acuerdo con la empresa Tenfield S.A, que asumió su compromiso logístico de montar la difusión del producto en su totalidad, siempre y cuando se disputase en el escenario de las inmediaciones del Parque Rivera.

Pese a lo esbozado, se hicieron gestiones a través de la Mesa Ejecutiva para agregar a los 70 habilitados por institución a ingresar al Charrúa, más allaegados para que en un entorno de 100 personas, se colmen un poco las expectativas de presenciar encuentros desde el escenario. Esto quedará a criterio de cada institución en caso de aprobarse y se habilitarán dos tribunas para dar lugar a la separación y control sanitario.

El local estará en la tribuna principal, ubicado desde la zona de palcos oficial hacia la derecha, detrás del banco de suplentes, mientras que el visitante en lo que sería la símil Olímpica en el Centenario. No podrá haber público detrás del banco visitante salvo colaboradores esenciales que no tengan permitido el ingreso al campo.