Brasil goleó 4-1 a Uruguay en la noche de jueves, en el Arena Amazonia de Manaos, y la celeste no solo cerró otra magra presentación en Eliminatorias, sino que una bajísima triple fecha en cuanto a resultados obtenidos, más allá de buenos momento futbolísticos ante Colombia y Argentina.
Los tantos fueron de Rapinha en dos oportunidades, Neymar y Gabigol. Para la selección nacional anotó de tiro libre para decorar el marcador, Luis Suárez.
Uruguay fue nuevamente un equipo sin identidad. Irreconocible, un momento crítico, que si bien lo mantiene en zona de repechaje a Qatar 2022, dio cuenta de un nivel bajo.
Volvieron a aparecer errores tácticos, interpretación de una idea y los rendimiento que eran necesarios no se vieron en su dimensión.
Luis Suárez y Lucas Torreira los que se rescataron por rebeldía. Fernando Muslera volvió a salvar enorme cantidad de chances. No se entendió la salida de Nicolás De La Cruz, el mejor de la primera parte.
Dos resultados saca técnicos, que ponen serias dudas respecto a la autocrítica general. Es cierto que hay una fecha de vencimiento programada, pero es para dar a pensar.
