Valverde, De La Cruz y De Arrascaeta complicados para estar con Uruguay
El sanducero Maximiliano Gómez retomó los entrenamientos en campo con Valencia tras perderse los últimos dos partidos por un microdesgarro en recto anterior de pierna derecha, y espera su evolución para ver si podrá estar ante Atlético de Madrid el fin de semana por la Liga de España, antes del parón internacional que proseguirá con la actividad de la selección uruguaya por Eliminatorias.
El entrenador de su equipo, Bordalás esperará hasta el final la recuperación del ariete uruguayo. No obstante, en caso de no poder estar al 100%, probablemente haga que se pierda los cotejos con la celeste, determinación que se conocerá el viernes cuando salga la nómina definitiva del cuerpo técnico de Uruguay, encabezado por el maestro Óscar Washington Tabárez.
Asimismo, preocupa la situación sanitaria de Federico Valverde y Giorgian De Arrascaeta. El volante está suspendido para jugar ante Argentina y sumado a su esguince de ligamento lateral de rodilla, su no convocatoria con Real Madrid para jugar con Shaktar y como ultima posibilidad de sumar minutos el fin de semana con Rayo Vallecano, todo hace pensar que no será considerado para estar ante Bolivia, con un viaje que puede afectar el proceso de recuperación final.
Por su parte, el mediapunta ofensivo de Flamengo, aún no recibió el alta médica del club para retomar los entrenamientos con normalidad tras el desgarro sufrido ante Colombia en la última ventana internacional de octubre. El elenco carioca debe jugar los días viernes 5 y lunes 8 de noviembre por el Brasileirao y el técnico Renato espera contar con él, aunque sabe que lo precisa en su mejor forma para la final de la Libertadores.
La última estadística marcada por Globo Esporte, sostuvo que sin el uruguayo en cancha, Flamengo obtuvo apenas el 30% de efectividad. Ganó tres encuentros de los últimos nueve.
No obstante, Nicolás De La Cruz, continúa entrenando diferenciado en River Plate de Argentina por su trombosis venosa en su pie izquierdo, que no le permite jugar. Si bien ya se calzó los botines y el proceso de recuperación es favorable, aún no le drena el coágulo. Esto obliga al cuerpo médico y profesores del equipo que conduce Marcelo Gallardo, que el futbolista continúe una semana más con ejercicios de poca exigencia, y por supuesto, que no hay fecha exacta para su regreso.