Respecto a la modificación del Plan Ibirapitá, considera que es la “exclusión de 280 mil adultos mayores que recibieron tablets y no entran dentro de este programa”.
“Para nosotros, hay que tener en cuenta la sostenibilidad financiera de los sistemas, pero también la suficiencia de las prestaciones que se brindan”, dijo Ariel Ferrari, director representante de jubilados y pensionistas en el BPS respecto al proyecto de reforma de seguridad social presentado por el presidente, Luis Lacalle Pou, a los líderes de la coalición. “Todavía no conocemos lo que contiene la reforma como para tener una opinión fundada. Lo que nos preocupa es si tiene alguna referencia en lo que analizó la Comisión de Expertos”, agregó Ferrari.
El director representante de jubilados considera “contradictorio” no pensar en los 200 mil jubilados que ganan $16.000 pesos y que “es más que insuficiente”.
“Hay razones que no son déficit desde nuestra visión que llevan a que se precise la asistencia y no a responsabilizar, como lo hace el documento de la comisión de expertos, a las reformas del 2009 y 2010 y a la sostenibilidad que tuvieron por 15 años”.
Respecto al relanzamiento del Plan Ibirapitá, considera “incorrecto” modificar algo que “había sido exitoso y donde las asociaciones de jubilados participaban activamente”. Agregó que el plan se creó con el objetivo de “no dejar a los adultos mayores postergados en un mundo que avanza a la tecnología” y que parece que “se transformó en algo comercial más que del Estado”.
“No hay fundamentos para cambiar el plan. Esto es la exclusión de 280 mil que recibieron tablets y no entran dentro de este programa”, finalizó Ferrari.
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