«Critican los números, porque los números no les gustan», afirmó Nicolás Olivera.
La Rendición de Cuentas no solo abrió sus debates en el Parlamento, en la capital de nuestro país, sino que también cada departamento tiene su historia.
Este fue el caso de Paysandú, donde los ecos sonaron fuertes entre el intendente, Nicolás Olivera y el Frente Amplio. Desde la oposición sostienen que las declaraciones del jerarca departamental a medios de prensa donde expresó que en 2020 la Intendencia había ahorrado en muchos sectores, «es una mentira».
El contador e integrante del Partido Socialista, Emiliano Molinari, analizó el documento presentado por la comuna, y aclaró a 970 Noticias que «realmente» no hubo una «reducción de gastos», sino que realizaron un cambio de «criterio» para distribuir los gastos.
«El gasto de recursos humanos en vez de imputarse como históricamente se hacía en el rubro de recursos humanos, se imputó en el rubro de inversión, la intendencia tendrá sus razones», delineó Molinari. En base a esa explicación, declaró que las palabras del intendente quien dijo que había una «mejora» en la gestión de recursos, «no son reales».
Por su parte, Nicolás Olivera afirmó a 970 Noticias que la oposición «critica los números porque no les gustan». «Es un documento público que presentamos a la Junta Departamental, como al Tribunal de Cuentas de la República, no somos tan tontos de subestimar a 31 ediles, al presentarles un documento que un poco más para el Frente Amplio es engañoso, y menos a siete ministros del Tribunal de Cuentas», delineó.
Siguiendo por este camino, Olivera «aseguró» que lo que se puso en cada rubro es lo que realmente tiene que estar. «Estos criterios fueron avalados por ellos cuando votaron el presupuesto», agregó.
Otro de los temas que llamó la atención del Frente Amplio, son los cuadros comparativos que nombró el intendente. «Es una mentira, porque lo que se hace es comparar es una gestión con un criterio, con otra gestión con otro criterio», dijo Molinari.
Además, sumó que también preocupa la participación de la fundación «A Ganar», que es una ONG que trabaja con la Intendencia. «Es una fundación amiga que responde a los intereses del Partido Nacional, ponen una cantidad de funcionarios en ella, y los sacan de la planilla de la Intendencia».
El objetivo de esto, según explicó el contador es «exonerar» aportes patronales. «La que tiene que determinar si es evasión es la DGI, lo que yo puedo decir que por lo menos eluden los impuestos», sentenció.
A esto, el intendente respondió que la fundación llegó por un llamado a licitación para gestionar centros CAIF, que en esos momentos estaban a cargo de la comuna. «Ningún CAIF en Uruguay paga aportes patronales, no estamos evadiendo impuestos, no pagan porque está previsto en la Constitución», sumó el jerarca.
«Ellos querían que la Intendencia siga pagando aportes patronales porque ellos lo pagaron», siguió expresando. En esta línea, puso sobre la mesa que los «mecanismos de contratación» que usa actualmente la Intendencia tienen las «mismas exoneraciones», que el Frente Amplio cuando estaba al frente de la comuna usó para contratar a las Cooperativas Sociales.
Foto: FocoUy