Tras la denuncia de una mujer violentada financieramente por su esposo, al prohibirle pagar las cuentas de OSE, el organismo gubernamental buscó soluciones.
La víctima tenía los servicios a su nombre pero su esposo no le permitía pagarlos. Cuando la mujer abandona el hogar, la deuda inicial comienza a sumar multas y recargos. Por eso decide, junto al apoyo de una organización dedicada a acompañar a mujeres violentadas, presentar ante el organismo estatal, Obras Sanitarias del Estado (OSE), su situación. OSE le brindó una tarifa social, para la exoneración de la deuda.
En estos casos, la víctima sufre de violencia y además queda en una situación de endeudamiento.
La violencia financiera es cuando el agresor interfiere en la supervivencia económica de la víctima. Por ejemplo cuando el victimario limita el uso de los recursos económicos de la otra parte; a su vez es el robo de dinero o la retención total del mismo.
Noelia Aysa, parte del equipo de la Comisión Asesora de Prevención y Actuación en materia de Género, Acoso y Discriminación (Cadig) en OSE, compartió con 970 Noticias que “hay mujeres que han generado deudas en situaciones de violencia”. Y destacó que en este último período ya se notificaron “cuatro casos vinculados a violencia”.
A pesar de que Cadig trabaja sobre situaciones de violencia de género dentro de OSE, parte del equipo se ha involucrado y abordado estos tipos de casos en conjunto con la Gerencia de contexto crítico y emergencia, quienes realizan las visitas técnicas a los clientes. Aysa menciona que los casos “generalmente vienen de la institución” que acompaña a la víctima.
“No se puede prevenir, se da una solución a partir de la demanda del cliente” explicó Aysa. A partir de que se presenta la situación ante OSE, se realiza una visita, se informa y se eleva un informe para aplicación de tarifa social o condonación de la deuda. Según Aysa, para así brindar “una forma de pago más accesible” y “amortiguar la situación” que vive la víctima. Luego de aplicar la tarifa social, se realiza un seguimiento de la continuidad de la tarifa, no de la situación particular.
Foto: Gastón Britos / FocoUy
