La lista de World’s Greatest Places los destacó como lugares imperdibles para visitar.

Una revista estadounidense referente a nivel mundial. Un ranking que cala profundo en el corazón de todos los viajeros año tras año. Y, en el top 50, dos destinos alucinantes ubicados tan solo en los confines de la Tierra. Salta y El Chaltén encontraron su merecido lugar en una de las listas universales más famosas de los últimos tiempos (World’s Greatest Places). 

¿Qué resalta el ranking en esta oportunidad? Ciudades famosas y emergentes con propuestas novedosas, marcando el camino hacia la sustentabilidad y la recuperación económica después de la pandemia. Los dos imperdibles argentinos tickean todas las casillas necesarias para posicionarse en el podio: naturaleza, paisajes, gastronomía, cultura y aventura. Las mejores experiencias para disfrutarlos en su máximo esplendor. 

Salta La Linda

La cultura vibrante y cálida del norte argentino se refleja en cada uno de sus rincones.  Salta, la provincia de los muchos colores, de los vinos de altura y de las artesanías únicas. La que vibra al ritmo de los bombos legüeros, las zambas y las chacareras. “Salta le da la bienvenida a los visitantes con experiencias nuevas (y antiguas) que garantizan calidez para el alma y calma para el cuerpo”, aseguran desde TIME. Estas son algunas de las recomendaciones para conocerla como corresponde:

1. Degustar gastronomía local en El Baqueano

Un restaurante oriundo de Buenos Aires que acaba de desembarcar en Salta luego de 13 años en Buenos Aires. La revista TIME destaca esta joya gastronómica como una de las razones que ayudaron a la provincia salteña a posicionarse en el ranking. Panorámicas de ensueño desde el Cerro San Bernardo, platos estacionales con productos de primera calidad y una atención personalizada son algunos de los distintivos que lo caracterizan. 

2. Sumergirse en las termas del Hotel Termas de Rosario de la Frontera

Otro predilecto que le robó el corazón a TIME. A 110 kilómetros de la capital se emplaza un alojamiento que hace exactamente 142 años marca tendencia en la provincia. El Hotel Termas de Rosario de la Frontera es una propuesta lujosa en plena naturaleza, con canchas de golf y siete manantiales de agua con temperaturas desde los 25° hasta los 99°. 

3. Caminar las calles de Seclantás

En el pequeño pueblo de Seclantás (solo tiene 300 habitantes) las paredes de las casitas respiran cultura y son refugio de las manos que confeccionan la prenda de vestir más característica del norte – y de todo el país -: el poncho. De todos los colores y diseños posibles, este abrigo se coloca arriba de la ropa, cuenta con un agujero en el centro para la cabeza y su tibia lana recubre el resto del cuerpo. Los tejedores seclanteños son maestros artesanos que ofrecen su arte a los visitantes que anhelan conectar con las raíces de Salta. Recomendación para los que vayan por la zona: visitar Casa Díaz, un restaurante con huerta propia donde se rescatan las recetas ancestrales de la región. 

4. Probar el Torrontés, la cepa insignia de la región

El turismo enológico dice presente en el itinerario y los aficionados del vino se lo agradecen. Cultivos de alturas que rondan los 1750 a 3050 metros, y con amplitudes térmicas que favorecen la maduración de la vid. La Ruta del Vino en Salta es una actividad única que encuentra su mejor versión en Cafayate. 

5. Visitar las Salinas Grandes

Infinito blanco. Lagunas de agua que espejan las nubes del cielo. Silencio profundo. Una de las Siete Maravillas Naturales del país descansa en la provincia de Salta y recibe a miles de turistas por año. No es casualidad: los 200 km2 de extensión combinados con los 3500 metros de altura son la receta de la felicidad para los fanáticos de la fotografía y las nuevas experiencias.