El padre que había asesinado a sus hijos de siete y ocho años en abril fue condenado a 28 años de penitenciaría. Según informó El Observador, la fiscal de Homicidios Adriana Edelman, le imputó el delito de delito de homicidio especialmente agravado por el parentesco y muy especialmente agravado por la brutal ferocidad. La sentencia se produjo por proceso simplificado, es decir el victimario admitió su culpabilidad.
El pasado 26 de abril, el hombre asesinó a sus hijos con cuchillo de cocina mientras ellos dormían. El matrimonio ya había concluido, pero los niños continuaron viviendo en el apartamento con su padre, mientras se desarrollaba el proceso de separación legal.
El homicida consta de un matrimonio anterior, con el que tenía una hija. Ya había tenido denuncias por violencia doméstica. La pericia del Hospital Psiquiátrico Vilardebó indicó que su personalidad tenía rasgos narcisistas y paranoides, pero no indicaron que sea inimputable.
El hombre admitió su culpabilidad, en lo que se conoce como proceso simplificado. De esta forma, su ex mujer y madre de sus hijos, no tuvo que seguir transitando el camino del juicio oral. La Fiscalía de Homicidios solicitó la pena máxima para este crimen, unos 30 años de reclusión. Como el sujeto en cuestión admitió el delito, se le descontaron dos años.
Foto: Gastón Britos / FocoUy
