La masificación de la Inteligencia Artificial (IA) en las últimas semanas permitió que profesionales, emprendedores y usuarios de todas las edades experimenten con la creación de contenidos de todo tipo. Dejando de lado el marketing digital y el diseño de imágenes en general, ¿qué sucede con la música? ¿Cómo es la relación entre ellas? Y a partir de esto, ¿cuál será el futuro de la industria musical?
En el espacio Esa No La Tenía de Nadie Se Atreve, la productora y columnista, Avril Andrés, explicó qué es la IA y cómo funciona. También, indicó las diferencias que existen entre la IA de aprendizaje automático y la IA de aprendizaje profundo.
Entre canciones creadas por IA, Andrés explicó que la imitación de voces y melodías «es totalmente posible y que puede hasta llevar a un riesgo» porque el copyright es un nuevo aspecto a tener en cuenta: ¿Quién es dueño de una canción que creó un IA, pero qué usó voces de otros artistas?
Lo sorprendente de esta tecnología, es que no es tan nueva como pensamos. Si se realiza un viaje en el tiempo, podremos encontrar que en 1951, fue la primera vez que la IA tuvo algún vínculo con la música, según indicó Andrés. Esto se da gracias al matemático, Alan Turing, que programó una máquina que podría crear artificialmente tres melodías.
¿Qué podemos intuir sobre el futuro de la industria musical? Ella subrayó que quién definiría esto, será el «consumidor musical».
Escuchá la columna completa de Avril Andrés en Nadie Se Atreve sobre la música y la IA:
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