En medio de la discusión sobre la permanencia de mampara en el taxímetro, a raíz del accidente sufrido por el periodista Daro Kneubuhle, el Centro de Propietarios de Automóviles con Taxímetro del Uruguay (Cpatu), la Cámara de Transporte y la Fundación Gonchi Rodríguez retomaron el debate sobre si se debería flexibilizar la normativa impuesta hace 30 años por la Intendencia de Montevideo.
“Para nosotros es un tema delicado que requiere una discusión seria, no una discusión como la están planteando estos actores. La mampara es el elemento de seguridad más importante que tenemos y de hace 30 años ya, que ha salvado innumerables vidas, hay que recordar que previo a su instalación, y es lamentable hablar así de números, porque son vidas había un promedio de 9 trabajadores muertos por año desde el asiento de atrás, luego de su instalación bajó a cero”, expresó Damián Fernández, vocero del Sindicato de los Trabajadores del Taxi (SUATT) a 970 Noticias.
“El tema que plantear la opcionalidad de algo en el sector es jugar a lo que quiere el patrón, hay que recordar que la patronal es un monopolio en el sector de transporte individual de pasajeros, donde se marcan las reglas del juego”, dijo Fernández.
“Los trabajadores son coaccionados, son amenazados, puestos en listas negras, suspendidos de la aplicación Voyentaxi que eso significa bajar a menos de 50 % la recaudación, cuando los patrones, los dueños de los taxis hacen denuncia hacia los trabajadores, entonces plantear una opcionalidad en ese sentido es plantear derecho a sacar la mampara”, enfatizó el vocero de SUATT.
“En este contexto donde la patronal del taxímetro manda en el sector, es inviable pensar que un patrón le venga a preguntar al empleado si quiere mampara o no, lo que va a suceder ahí es que van a ser amenazados para salir a trabajar sin mamparas”, expresó Fernández.