El Poder Ejecutivo y OSE apelarán el fallo del juez Alejandro Recarey, quien ordenó a OSE no firmar el contrato para la construcción de una planta potabilizadora en Arazatí, correspondiente al proyecto Neptuno. La sentencia del magistrado afirma que hay bases como para suponer que puede estarse ante un proceso de privatización parcial del suministro público de agua potable”.
Desde el Gobierno, se asegura que «el proyecto garantiza un derecho básico a la población que reside en Montevideo y el área metropolitana, como es el acceso al agua potable».
La precandidata del Frente Amplio, Carolina Cosse celebró la sentencia de Recarey y dijo sentir «alivio» por la decisión ya que entiende que «faltan estudios ambientales». ¿Cómo van a responder a 70 días de salinidad si no es una planta desalinizadora?», se preguntó en declaraciones a Radio Montecarlo.
Por su parte, el senador Sergio Botana se expresó en la red social X (ex twitter), y dijo: “El juez Recarey es una vergüenza para la República. Antes atentó contra la vacunación. Ahora contra el AGUA. Confunde ley con ideología. Él es JUEZ no militante de comité de base.”
Foto: Focouy
