Luis Suárez, máximo goleador histórico de la Selección Uruguaya y de las Eliminatorias, anunció su retiro de la celeste luego del partido del próximo viernes ante Paraguay.
Radio Universal estuvo allí y compartimos sus palabras…
“Antes de empezar a hablar quiero darle mis condolencias a toda la familia de Juan (Izquierdo), a su señora, sus hijos, sus padres y a todos sus allegados”.
“Como representante de la selección, los jugadores estaremos a disposición de su familia en estos momentos difíciles”.
“Me hubiese encantado que se enteraran por mí; para eso era la conferencia. Sepan entender, el día viernes…Me cuesta…(mientras lloraba y aparecían aplausos)
“Es el momento indicado. Es muy difícil. Voy a jugar mi último partido (Paraguay) como jugué el primero en 2007, con las mismas ganas e ilusión que tenía ese niño de 19 años. Ese jugador veterano va a dejar la vida el día viernes”.
“Me voy con la tranquilidad de que di todo lo que tenía por la selección. Di el máximo. No tengo nada para reprocharme en ningún momento”.
“Hay que quedarse con todo lo vivido. Me tengo que ir con todo el cariño que me llevo de la gente y de mis compañeros”.
“Creo que no hay mejor orgullo para uno mismo que irse sabiendo cuándo es el momento indicado”.
“Me retiro de la selección porque yo quiero dar un paso al costado, en el sentido de que hay jugadores con grandísima proyección”.
“Tengo 37 años y sé que para el próximo Mundial es muy difícil de llegar. Que me retire yo y no las lesiones, me reconforta mucho”.
“Está confirmado; se lo comuniqué al entrenador (no estará ante Venezuela). Analizando las situaciones, dije: ‘¿Por qué no hacerlo con mi gente, en mi estadio’?”.
“Maestro (Tabárez) fue uno de los primeros a los que se lo comuniqué, porque sé lo que es. Él sabe lo que representó para mí en mi carrera en la selección, y se lo hice saber”.
“El 90 % de mi carrera en la selección es de él. Es una persona que me ha dado todo. Le hice un pedido especial para el día viernes, pero yo ya lo conozco, sé cómo es y lo entiendo perfectamente”.
“Viví capítulos increíbles. No cambio el título de la Copa América por nada en el mundo”.
“Me voy con la tranquilidad de que di todo lo que tenía por la selección. Di el máximo y no me puedo reprochar nada”.
“Tuve muchos altibajos, pero siempre me volví a levantar; nunca bajé los brazos. A la gente le gusta verte caer, pero más le duele verte levantar”
“Hay que quedarse con todo lo vivido. Me tengo que ir con todo el cariño que me llevo de la gente y de mis compañeros”.
“Espero una linda fiesta. Jugaré ese partido como si fuera el último de mi carrera. Despedirme con mi gente será algo muy lindo para mí”.
“Empecé en el Complejo siendo un niño que soñaba con jugar en la selección con la 10 de Francescoli. Irme de la forma en la que me voy, con tantos goles, con tantas alegrías, nadie me lo va a quitar”.
“Nadie me va a quitar lo que represento para el país. A veces, uno tiene que ser orgulloso y creerse lo que le dicen. No me voy a quejar para nada”.
