El refugiado sirio Jihad Diyab se fue este jueves de Uruguay.

Partió en un vuelo desde el Aeropuerto Internacional de Carrasco y su destino es la ciudad de Johannesburgo en Sudáfrica, confirmó a El País Christian Mirza, interlocutor de los otros cinco exprisioneros de Guantánamo que llegaron a Uruguay y que también lo fue de Diyab hasta que decidió no continuar con esa tarea.

Integrantes del grupo «Vigilia por Jihad Diyab», que acompañó al sirio durante su huelga de hambre, dijeron a Montevideo Portal que Diyab se encontraba con algunos dolores en los últimos días, producto de que aún no estaba totalmente recuperado de la huelga de hambre de más de dos meses que mantuvo en su última etapa en Montevideo.

Diyab había levantado la huelga de hambre a mediados de octubre, luego de recibir los documentos que había solicitado a la Cancillería uruguaya y que le permitirían acreditar su situación ante los gobiernos de Venezuela, Qatar, Turquía y Líbano.

Finalmente, sus allegados informaron el 24 de octubre que Diyab había conseguido «una solución intermedia» surgida «desde sectores de nuestra sociedad y del apoyo internacional, rescatando nuestro mejores valores en cuanto a país solidario».

Diyab había levantado a finales de octubre una huelga de hambre que duró 68 días cuando, según dijo su entorno, «recibió una propuesta para lograr viajar a otro país».

«A los 68 días de huelga de hambre, la lucha de Jihad Diyab por su derecho a reunificación familiar y reasentamiento ha logrado una solución intermedia. ¡La lucha paga!», informaba en ese entonces una publicación en la página de Facebook, Vigilia por Jihad.

Junto a otros tres sirios, un tunecino y un palestino fue acogido en Uruguay en diciembre de 2014 como parte del compromiso del entonces presidente uruguayo José Mujica de colaborar con su par estadounidense, Barack Obama, en el plan de cierre del penal de Guantánamo.