El verano hace que la piel sufra cambios producidos por el clima: el sol, la arena, el viento, el agua de las piletas, el aire acondicionado. Por este motivo una buena opción es procurarle un shock de procedimientos para compensarla. La tarea primordial será regenerar la piel, mejorar el engrosamiento, rehidratar, recuperar el brillo y la elasticidad.
Una sugerencia es comenzar con el pulido o peeling suave para provocar la descamación moderada y controlada de la epidermis (este procedimiento siempre se debe complementar con una humecto-nutrición para reponer el manto protector hidrolipídico). Esto permitirá afinar la piel, darle brillo y sumar elasticidad: lucirá sana, elástica, turgente y de color parejo.
Es fundamental una buena limpieza con productos suaves, sin detergentes ni fragancias. De noche se pueden utilizar cremas tratantes hidratantes, sueros o lociones que contengan antioxidantes (la noche es el mejor momento para que actúen los principios activos). De día, aplicar cremas humectantes que cumplan con la función de barrera, siempre con factor de protector solar o agregar sobre ella el protector. Actualmente muchas de las cremas de día también incorporan algún antioxidante como la vitamina E (tocoferol), C (ácido ascórbico) o similares. Estos reducen los efectos nocivos de los radicales libres.
Consejos para mantener la piel hidratada
- Usar mascarillas para prevenir la deshidratación.
- Realizar peeling contribuye a obtener una rápida mejoría en la humectación y textura de la piel ya que remueve en parte las células muertas. Se puede realizar tanto en invierno como en verano.
- Utilizar filtro solar, mínimo FPS 30. En la cara, manos, escote y cuello, FPS 50. Se debe colocar media hora antes de exponerse al sol y reponerlo cada 2 horas. Hay que evitar la exposición entre las 10 y las 16.
- Las cremas deben cumplir la función de “barrera”, es decir, evitar la pérdida transdérmica de agua.
- Los maquillajes siliconados contribuyen a reforzar la barrera de la piel. Por este motivo es importante elegir la base correcta en cada estación.
- Hay que proteger el cuerpo entero: los labios, las manos, escote, las rodillas y los codos.
- Evitar los cambios bruscos de temperatura, por ejemplo, el agua de la ducha demasiado caliente, sobre todo las personas que presentan enrojecimientos o rosácea. En este caso están indicadas las cremas con manzanilla, aloe vera, té verde, avena y hamamelis para descongestionar.
- Tomar mucha agua, por lo menos 2 litros diarios.
- Utilizar algún jabón blanco cremoso con PH neutro, puede ser líquido o en barra.
También se recomiendan las sesiones cosmiátricas de hidratación. Son válidos todos los tratamientos que estén orientados a evitar la tirantez, las irritaciones y la sequedad.
Los peelings de verano son sin descamación. Estos no producen fotosensibilidad, por este motivo no manchan. También se puede utilizar ácido hialurónico en mesoterapia para revitalizar la piel, con resultados muy importantes para el verano. Se realiza en quince minutos y la paciente sale del consultorio con la piel renovada.
Sustancias hidratantes eficaces
- Ácido hialurónico (AH): Tiene la propiedad de retener gran cantidad de agua por lo que por lo que resulta muy útil a la hora de hidratar. Tiene la capacidad de retener el agua en un porcentaje equivalente a miles de veces su peso. Es por eso que se emplea para hidratación de la epidermis ya que reconstituye las fibras que sostienen los tejidos de la piel. Formulado en crema previene arrugas.
- Aloe vera: Contiene mucopolisacáridos que producen la hidratación celular y hormonas vegetales que estimulan su crecimiento. Es un importante regenerador, cicatrizante y tonificador. Se lo utiliza en la prevención de arrugas prematuras y para retarda los signos de la edad.
- Fucus: es rico en yodo, además estimula la circulación y contribuye a eliminar lípidos. Es hidratante.
- Ginseng: Contiene polisacáridos, vitaminas D y B, proteínas, aminoácidos y oligoelementos. Tiene una rápida y eficaz penetración. Es excelente como antiage. Reduce la sequedad y las arrugas de la piel.
- Jojoba: Hidrata y reestructura el equilibrio graso. En su composición se encuentra la vitamina E, que es un antídoto contra los radicales libres de la piel. También contiene ácido linoleico que actúa como regenerador.
- Soja: Tiene minerales (calcio, hierro, magnesio, fósforo, potasio, sodio, trazas de selenio, zinc, estroncio y cobre). Vitamina E que es antioxidante. Es excelente para las pieles menopaúsicas, les devuelve la hidratación y la turgencia.
- Urea: Es muy usada en cremas hidratantes por su efectividad.