El juez penal Marcos Seijas informó que tanto en el caso de Soca como en el de San Luis, en los que hubo denuncias previas de violencia doméstica, las víctimas permitieron por propia voluntad que el agresor volviera a acercarse. «Eso nos lleva a preguntar si la respuesta judicial alcanza. Yo creo que no», afirmó.

Para Seijas, luego de la actuación de la Justicia las víctimas y los victimarios «deberían ser enviados a programas de apoyo», entre otras cosas: