Según la última encuesta nacional, realizada en 2011 por el Instituto Nacional de Estadística (INE), hay más de 34 mil niños, y adolescentes trabajadores de entre 5 a 17 años, a nivel nacional, lo que representa un 7,9% del total de la población de estas edades.
En Uruguay, para que un menor esté habilitado para trabajar, tiene que tener 15 años y un permiso otorgado por Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU). De acuerdo a los datos del INAU el año pasado se otorgaron 2.500 de esos permisos, 1.300 en Montevideo y 1.200 en el Interior.
Sin embargo, según el último censo del Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el 7,9% de los habitantes de entre 5 y 17 años trabaja. Esto es, más de 34 mil. Esta cifra fue recordada este lunes, en el marco del Día Mundial de Lucha contra el Trabajo Infantil.
Más de treinta mil menores de edad -muchos de ellos niños- están trabajando sin que el INAU lo sepa.
En el mes en el que se celebra el Día Mundial de la Lucha Contra el Trabajo Infantil, la Inspección Nacional del trabajo infantil y adolescente de INAU ha realizado como cada año, una serie de talleres y charlas, para sensibilizar a los más pequeños trabajando desde una perspectiva de derechos,e informar a los adolescentes sobre normativa vigente en materia de trabajo para menores de 18 años, listado de tareas peligrosas, trámite del carné de trabajo y Ley de empleo juvenil.
Las mismas han sido realizadas en distintos puntos del país e incluyen centros educativos de primaria públicos y privados, escuelas técnicas de la UTU , Clubes de niños y Centros juveniles en convenio con INAU, centros de educación secundaria, organizaciones civiles, empresas, entre otras.
Mucho del trabajo infantil ocurre en el medio rural. En las zonas urbanas, son frecuentes en las tareas del tipo doméstico.
Además, esos trabajo no deben ser considerados riesgosos ni suponer jornadas laborales superiores a las seis horas, que impidan al involucrado estudiar.
«¿Qué es lo que se puede hacer? Se hace mucho, se está en permanente movimiento en todo el territorio. Se busca dar información, comunicarse con la familia, con las fuerzas vivas. No es solo poner multas sino realizar un trabajo con adolescentes», señaló Cohen a Ecos.
Sin embargo, el funcionario dijo que INAU cuenta con apenas «una decena de inspectores a nivel nacional», lo que dificulta mucho la tarea. «Estamos en un proceso de llamar a concurso», precisó.
Esos inspectores tienen mucho trabajo. El año pasado INAU realizó 2.650 operativas y atendió 24 denuncias, «sobre todo en trabajos de actividad rural, construcción y comercio».
En 2002 la Organización Internacional del Trabajo (OIT) consagró el día 12 de junio como el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, y decidió que este 2016 se concentre en las cadenas de producción, a las que la globalización volvió tan complejas que resultan difíciles de controlar.
Según informa la OIT, unos 215 millones de niños trabajan en el mundo, muchos de ellos a tiempo completo, no reciben alimentación ni cuidados apropiados; no van a la escuela ni tienen tiempo para jugar. “En otras palabras, se les niega la oportunidad de ser niños”. Más de 100 millones de estos niños están sometidos a la esclavitud u otras formas de trabajo forzoso, o forzados al tráfico de drogas, la prostitución, o la participación en los conflictos armados.
El Programa Internacional para la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC) de la OIT, se creó para alcanzar la abolición efectiva del trabajo infantil. Según este programa, además, un gran número de niños hacen trabajos domésticos, remunerados o no, en los hogares de terceras personas, “ocultos a la mirada de la sociedad” y aislados de sus familias, lo que los torna particularmente vulnerables.