Futbolista de padre brasileño y madre uruguaya. Nació el 15 de junio de 1996 y desde los 15 años está en Montevideo. Llevando una vida tranquila y más cerca de algunos de sus seres queridos, de los cuales debió desapegarse para cumplir su sueño de jugar a la pelota, vive al máximo la algarabía de compartir el primer equipo de Defensor Sporting.

Previo a la final de la Copa de campeones uruguayos ante Nacional en el estadio Centenario, Ayrton Cougo nos recibió en su segunda casa, el Parque Luis Franzini, escenario de la institución a la cual desde que llegó le debe mucho y le seguirá siendo fiel porque el respeto y los valores que se inculcan, sostiene, no se aprenden en otro club.

En una entrevista concebida con la humildad que caracteriza al muchacho de pueblo, que lleva el nombre del piloto brasileño tricampeón mundial de Fórmula 1, Ayrton Senna, en la hora previa al almuerzo del plantel principal, recordó sus inicios y la venida a Montevideo. Asimismo, destacó que tiene la espina de poder vestir la camiseta de Inter de Porto Alegre aunque también le seduce el fútbol europeo.

¿Cómo se da el acercamiento al fútbol en Cerro Largo?

“Desde que era muy chico siempre andaba con una pelota abajo del brazo y vivíamos en frente a una canchita de baby fútbol. Mi abuelo me cuenta que nos llevaba a jugar antes de la escuela y en eso que ahí practicaba un cuadro (Olimpia), el técnico nos invitó a participar y ese día practiqué con los más grandes e hice dos goles. Al entrenador le gustó y a partir de ese momento me fui formando. Además mi padre también comenzó a trabajar en el club. Después pasé por Boca y la selección sub 15 de Cerro Largo (2012) donde salimos campeones”.

Cómo llega Ayrton Cougo a Defensor Sporting?

“Antes no quería venir. Llamaban a mi viejo para que viniera a practicar pero prefería como estaba en la edad de los cumpleaños de 15 quedarme allá. El “cabeza” Daniel Ureta siempre estaba intentando traerme para acá. También Heber Silva Cantera me dijo que me vio en un partido en Minas. Esas son las dos versiones. Luego fueron tres días de prueba. En uno hice fútbol y a Román Silva le gustó. Cuando volví me avisaron que me iban a llamar y al mes se comunicaron conmigo para decirme que tenía que ficharme”.

¿En qué aspecto de la vida resaltó más la venida a la capital del país?

“El cambio fue grande. Tener a tus padres que te hacen todo, la tranquilidad del interior, a todos tus amigos allá que luego con los años se vinieron a estudiar y fue un poco más de alivio se siente. Desde el año pasado mi hermano está conmigo también y con eso complementé todo. Actualmente eso me deja tranquilo porque la familia me apoya. Todo el tiempo mi vieja me llama y está preguntando en cada detalle lo necesario”.

Estando Cerro Largo tan próximo a la frontera, ¿no hubo oportunidades de emigrar al fútbol brasileño?

“Tuve una etapa de los 10 a 11 años en Inter de Porto Alegre. Entrené tres semanas allá pero tenía que quedarme seis meses sin jugar porque llegué fuera del período de pases. Mi viejo prefirió que terminara los estudios y como era abanderado me hicieron dar vuelta. Tengo esa espina aún y ojalá pueda darse la posibilidad de retornar en un futuro”.

¿Qué decían tus padres cuando les consultabas por qué el nombre de Ayrton?

“Fin de semana por medio, los domingos, era charla en la mesa porque me habían puesto Ayrton. No había otro nombre porque ni siquiera se había pensado un nombre de mujer cuando mi madre se enteró que estaba embarazada. Ella es fanática de Ayrton Senna y dijo que iba a tener un varón y así fue”.

¿Qué tiene el mundo Defensor Sporting para motivar a sus futbolistas a defender a esta institución?

“Defensor tiene todo. No le falta nada porque desde que llegás del interior siempre hay alguien que está preguntando por vos, si estás cómodo, si precisas algo. Te dan para adelante y buscan sacar lo mejor de vos a cada momento. Te enseñan valores, el respeto por el rival, entre nosotros mismos, que es fundamental en un grupo”.

¿Qué significó en tu vida conocer a Juan Ahuntchain?

“Juan por momentos fue mi psicólogo, mi padre, el aliento que siempre tenía de afuera. Cuando no estaba mi familia escuchaba la voz de Juan que decía ¨dale que vos podés¨, ¨te falta un poco¨, fue muy importante. Después que se fue a Peñarol nos costó dos o tres meses acomodarnos a su falta”.

¿Cuándo te ascienden a Primera División y ante quién debutás?

“Arranco a hacer pretemporada con Mauricio Larriera y él me manda a jugar en Tercera división pero en la semana entrenaba con la primera. Después Juan Tejera cuando llega me deja definitivo en el plantel principal y debuto contra Racing en 2015 en un partido que no trae buenos recuerdos porque perdimos 3 a 0 acá en el Franzini”.

La ida de Matías Zunino a Nacional, ¿te abre la puerta de la titularidad definitivamente en este Clausura?

“Más allá de eso pienso en trabajar y para mí lo que el técnico elija está bien. Siempre quiero jugar y esa fue mi mentalidad desde un principio, estando o no Zunino o el jugador que fuera”.

Qué ¨felling¨ tiene Eduardo Acevedo con el plantel y cuanto le aporta a Defensor Sporting institución?

“Eduardo es una persona que sabe mucho, demasiado te diría. Desde que comienza la semana está buscando el mínimo detalle y te dice lo que va a pasar en el partido. Cuando te toca entrar parece que ya lo viste y es muy difícil que le erre”.

¿Es tan mediático como se menciona a menudo?

“Como estoy en la cancha no le presto mucha atención porque no miro para afuera o si me toca estar en el banco generalmente estoy atento al trabajo de los compañeros. Cada uno tiene su forma de ser pero las bromas siempre están entre todos”.

Jugarías en un equipo grande de Uruguay?

“Mi pensamiento desde un principio fue que no porque le debo mucho a Defensor y la mejor forma de pagárselo es siéndole fiel hasta el último momento. No digo que de acá a 15 años tenga la necesidad pero debe ser máxima para ir. Defensor va a ser siempre mi casa”.

¿Te ilusionas con pegar el salto a Europa culminado este campeonato Uruguayo?

“Desde un principio cuando un jugador arranca su carrera tiene el sueño de irse a Europa pero lo que venga de aquí en adelante está bien, sea cruzando el charco o bien por acá cerca. Además, estando en un club como Defensor que es de los que más vende siempre hay posibilidades”.

Te representa Flavio Perchmann ¿Qué opinión consideras al respecto de los agentes estén involucrados en el fútbol?

“Si no te movés con representante en este ámbito estás muy de lado, como en el fondo de la bolsa. Se necesita una persona que ponga la cara por vos en algunos momentos que no es conveniente hablar, que te aconseje y vea lo mejor para el jugador”.

Si la chance llegara mañana, ¿defenderías a la selección uruguaya o brasileña?

“A morir la uruguaya. Papá es brasileño y cuando juega con otras selecciones hincho por ellos pero a Uruguay no lo cambio por nada. Diga que las veces que juega contra nosotros no grita demasiado. Tampoco es de hablar mucho habitualmente”.

(Por Rafael Castillo)