Una crucial reunión entre el Ministerio del Interior, el Sindicato Médico del Uruguay y la Federación de Funcionarios de Salud Pública se realizó esta tarde.
En la misma intercambiaron toda la informción disponible sobre el rescate de un recluso del Instituto de Traumatología por tres delincuentes fuertemente armados, que dispararon más de 20 tiros sin herir a nadie por milagro.
El episodio está mereciendo una investigación administrativa del Ministerio del Interior y otra por parte de la justicia que tiene a cuatro policías indagados. También están siendo investigados el Director del Penal y el médico que firmara la necesidad de traslado de un recluso que presentaba un esguince de un dedo de la mano.
Quedó claro que no se cumplió con los protocolos establecidos. El recluso tenía antecedentes que lo signaban como «peligroso» y tenía un antecedente de fuga del Hospital de Clínicas por un operativo similar en el que dispararon a un policía. Estos hechos debían haber indicado que la guardia policial fuera mayor y tal vez que no fuera necesario su traslado.
Se acordó un grupo de trabajo para ajustar los protocolos. Se estableció que el próximo año cuando se inaugure la cárcel de Punta de Rieles que se construye por PPP, existirá una zona de atención médica con varias camas de internación, y también se construirá en el COMCAR una zona similar que permita descomprimir los centros de salud pública que actualmente reciben a los reclusos.
Martín Pereira de la gremial de Funcionarios de la Salud informó que el sindicato mantiene las medidas adoptadas y participará del proceso de coordinación en los centros sanitarios. Así declaraba a los medios:
El Presidente del Sindicato Médico, Dr. Gustavo Grecco, afirmó que «las fallas de protocolo no se deben repetir y este tema debe solucionarse con centros de salud en las cárceles». Los médicos llevan propuestas para plantear al sindicato y «mucho trabajo para hacer», dijo Grecco.
Aquí sus manifestaciones:
