Nuevas Raíces, Kaótika, Zeus y Fénix protagonizaron la noche del miércoles en el Teatro de Verano.
La etapa comenzó con la actuación de la comparsa Nuevas Raíces (N.R.), uno de los tres conjuntos de la categoría que vuelve al Carnaval de las Promesas tras un año de ausencia, hecho que es por demás importante para el concurso ya que una vez más, todas las categorías tienen representación y los componentes se lo toman con mucha seriedad y responsabilidad para presentar los espectáculos siempre sin perder la alegría y diversión.
A segunda hora subió la revista Kaótica con su espectáculo «La insoportable historia sobre el caos», donde recorren todas las edades, desde la primera infancia en adelante, y cuentan las diferentes situaciones de caos en las que se ven involucrados a lo largo de su crecimiento.
La dinámica propuesta que presentó el conjunto que tiene a Victoria Curbelo y Christian Gutiérrez en la dirección responsable y co-dirección, respectivamente, representaron escenas como en la escuela, donde la maestra no sabe qué más hacer para controlar a los dispersos niños, o el intento de superar los trastornos que genera ese caos en las personas, entre otras muy divertidas propuestas.
En tercer lugar se presentaron los parodistas Zeus, con la parodia de Narnia, donde Lucy, Edmund, Peter y Susan llegan a un mundo paralelo donde hay una reina malvada a quien deben derrocar con la ayuda de Aslan, la única esperanza que le queda al pueblo.
Es preciso hacer un comentario aparte para destacar a la niña que interpretó el papel de Lucy, una de las más pequeñas del conjunto que llevó el hilo conductor e hizo las delicias de la platea con su natural interpretación del personaje como si fuera una profesional del teatro y se llevó las mayores ovaciones, que a veces hasta obligaron a frenar por un instante el espectáculo a la espera de que terminen los aplausos.
El cierre de la noche estuvo a cargo de la revista Fénix con su «Metamorfosis», donde relatan los cambios que tienen los jóvenes a lo largo de su crecimiento y cómo hacer para convivir con ellos.
El espectáculo toca muchísimas aristas y con participación de todos los componentes atraviesan temas como el amor juvenil, la popularidad, el consumismo del que son esclavos para estar a la moda, y hasta se atreven a reírse de los padres del conjunto y cómo se desenvuelven en las largas jornadas de los ensayos.