Si bien Uruguay es un Estado que no profesa ningún credo en particular, el país cuenta con una variada agenda de fiestas religiosas, fiestas patronales, y peregrinaciones durante la Semana Santa.

Centros espirituales, místicos o devocionales, pueden visitarse en cada uno de los 19 departamentos. Más allá de sus creencias, los visitantes pueden apreciar la riqueza histórica, patrimonial y arquitectónica de los templos, las obras de arte en pinturas, imágenes y vitrales, que generan espacios propicios para la contemplación.

Además, Uruguay tiene puntos energéticos que convocan visitantes atraídos por las experiencias místicas y los maravillosos paisajes de estos lugares.

Lugares como Calera de las Huérfanas, un patrimonio jesuita recuperado en Colonia, la Gruta del Padre Pío en el límite de Paysandú y Salto, la Capilla Fenocchi en Cardal (Florida) con su mística y colores otoñales, cobran especial valor turístico durante la Semana de Turismo.

Durante el viernes santo se suceden actividades como el tradicional Vía Crucis del Cerro de Montevideo, que en 14 estaciones recorre el camino de la cruz hacia la cima, la pintoresca procesión del Cristo articulado por las calles de Villa Santo Domingo Soriano (Soriano), la celebración de la Muerte del Señor en Valizas (Rocha), el Vía Crucis en Aguas Dulces (Rocha) y en La Floresta (Canelones).

¡No te pierdas de conocer estos hitos religiosos!

Calera de la Huérfanas.

Este magnífico legado jesuita está ubicado al suroeste de Uruguay, a 16 kilómetros de la ciudad de Carmelo. Declarada Monumento Histórico Nacional,  es todo un atractivo turístico donde la historia es la protagonista de un recorrido que incluye una antiquísima capilla, restos de otras construcciones, hornos de cal que se pueden recorrer desde una pasarela de madera, una sala de interpretación y hasta un sendero de monte nativo..

Capilla Fenocchi.

A 3 kilómetros de Villa Cardal en la Ruta Nacional Nº 77, en el suroeste del departamento de Florida,  se encuentra esta capilla, que fue levantada en sus campos por el matrimonio conformado por Pedro Fenocchi y Teresa Marioni, agricultores italianos radicados en la zona, en recuerdo a cuatro de sus hijas fallecidas durante la grave epidemia de difteria que en 1889 afectó la zona. Un lugar cargado de emociones y mística.

Gruta del Padre Pío.

Dedicada al Santo Pío de Pietrelcina, está ubicada en la estancia La Aurora, sobre del río Daymán, en el límite entre los departamentos Paysandú y Salto. Los dueños de la estancia, la familia Tonna, la construyeron   junto a  colaboradores anónimos, motivados por su fe religiosa.