Esta mañana se realizó la audiencia de formalización, en la sede del juzgado penal de Juan Carlos Gómez, por el caso del hombre de 90 años que el lunes pasado mató a su esposa, una mujer de 96 años, alegando motivos «de piedad».
Según informó El País, la jueza Laura Sunari resolvió 60 días de prisión domiciliaria sin vigilancia para el acusado.
El fiscal Juan Gómez había pedido 120 días de arresto domiciliario, teniendo en cuenta la falta de movilidad del anciano y basándose en el artículo del Código Penal que permite este tipo de arresto para personas mayores de 70 años.
La defensa, por su parte, había pedido 30 días de arresto domiciliario, y antes había pedido que se marque como “homicidio piadoso”, porque según el relato del hombre su esposa le había pedido que la matara. El pedido de la defensa se basa en el artículo 37 del Código Penal que dice que «los jueces tiene la facultad de exonerar de castigo al sujeto de antecedentes honorables, autor de un homicidio, efectuado por móviles de piedad, mediante súplicas reiteradas de la víctima».
Según supo El País, la defensa del hombre quedó conforme con la resolución de la jueza.
La muerte ocurrió en la mañana del lunes en la casa donde residía el matrimonio, en el Pasaje B casi Laudelino Vázquez, barrio Villa García.
Hace tres años que la mujer utilizaba una silla de ruedas y tenía dificultades auditivas. A las 9 de la mañana sonó un timbre que los ancianos habían instalado para avisar a los vecinos cuando la mujer se caía.
Como de costumbre, uno de los vecinos se presentó a ayudar, pero se encontró a la anciana con un disparo en la nuca y su marido con un revólver en la mano, desesperado y llorando.
La mujer falleció cerca de la hora 11 tras recibir asistencia médica. El vecino y el anciano llamaron a la Policía. De inmediato, el marido fue detenido. Ante el fiscal Juan Gómez, el hombre admitió los hechos y declaró que su esposa le pidió «varias veces» que la matara.