El presidente Mauricio Macri aprovechó la inauguración de la estación Julieta Lanteri de la línea H este jueves para enviar un mensaje político en armonía con la autocrítica que hizo ayer en conferencia desde la Quinta de Olivos. «Las transformaciones no son fáciles, sobre todo si son profundas», aseguró esta mañana.
Junto a jefe de Gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, Macri hizo una suerte de breve repaso por los aciertos y las metas de su gestión y recordó los inicios de Cambiemos en la Ciudad: «Los vecinos de Buenos Aires fueron los primeros en creer que sí se podía», indicó. Y sostuvo que nacía «una nueva forma de hacer política».
El Presidente, además, destacó que la nueva estación a metros de la Facultad de Derecho es un ejemplo del «plan de infraestructura más importante de nuestra historia» que lleva adelante el Gobierno.
«Las obras empiezan y terminan, no como en el pasado, que amagaban y se demoraban en el tiempo», dijo. «Ahora las obras que son sinónimo de alegría y de esperanza, y no más de corrupción», agregó.
Macri remarcó que «las obras han servido para poner en marcha la generación de empleo» y que «100.000 familias lograron alcanzar la vivienda propia a partir de un crédito».
«Esto es parte de la agenda de hacerse cargo de muchas cosas que estaban pendientes», indicó.
«Las transformaciones no las hace un gobierno, las hace la sociedad. El conjunto de la sociedad, convencida de lo que está haciendo. Lo que no podemos hacer es resignarnos, decir no se puede. Lo que sí tenemos que ser es protagonistas», concluyó.