Un informe de Giuliana Perdomo para Fuentes Confiables detalló las perspectivas del mercado automotor en Uruguay para el 2018.
Este año se prevé una baja de las ventas entre un 5 y un 10% a causa de la suba del dólar y el aumento de la tasa consultar que Poder Ejecutivo incluyó en la última Rendición de Cuentas que rige desde el 1º de enero. Se espera que el mercado repunte a finales de 2018 como sucede cada año.
Si bien es muy pronto para hacer un análisis de las ventas desde la Asociación del Comercio automotor de Uruguay señalan que el dólar influirá directamente, tomando como ejemplo su comportamiento a finales de 2016 que bajo y el mercado repuntó, al igual que en 2017 que se mantuvo en torno a 28 pesos e hizo que fuera un año demandante.
Además se señala que la crisis en el sector agropecuario puede repercutir en las ventas de vehículos utilitarios destinados a esta labor lo que presentaría un año desfavorable comparado con el 2017. Debido al aumento de la tasa consular que pasó del 2 a 5% las ventas en diciembre del 2017 se dispararon, colocando 1642 unidades más que en el mes de noviembre, lo que representa una suba de 47%. Esto hizo que el año pasado cerraran las ventas con 56 mil 500 vehículos vendidos, 8 mil más que en 2016 y 5 mil más que en 2015.
Ignacio Paz gerente general de ACAU, señalo que este comportamiento era esperable y como consecuencia el comienzo del año tuvo una caída importante y luego se neutralizó. Lo que va del cuatrimestre representa una baja del 5% comparado con el 2017, con una moderada mantención del nivel de ventas.
Otro dato relevante es que en 2017, la recaudación de DGI por concepto de Impuesto específico interno fue récord. El Imesi es el mayor tributo que se le agrega a los vehículos acorde a su cilindrada. Se recaudó por compras de 0 km unos 4.511 millones de pesos equivalentes 157 millones de dólares.
Ese monto creció 7,5% en valores reales arriba de la inflación frente al 2016 y se trató de la mayor cantidad de dinero en valores corrientes que ingresó a la dirección general impositiva desde que se creó el impuesto en 2012. Esto se dio por las buenas ventas de 2017.
La carga impositiva de los vehículos en Uruguay hace que el comprador pague al menos el doble del precio, y en algunos casos hasta cuatro veces más que el costo del auto puesto en el puerto de Montevideo. La mayor parte de ese sobreprecio por los tributos se lo lleva el Imesi que aplica tasas entre 23% y 46% para los autos a nafta dependiendo la cilindrada, y de 115% para los coches a gasoil, con excepciones para los utilitarios. A esto se le agrega el IVA, el arancel externo y además los gastos portuarios.
Ante esto los autos compactos siguen posicionando las ventas. El Imesi antes era el 30% para todos los vehículos, luego se racionalizo en atención a la eficiencia energética tomando el dato de la cilindrada. Lo que hizo que bajara el impuesto a 23% para los compactos y para al resto de las gamas aumentara, trasladando las ventas a estos autos que al día de hoy son los más económicos.
Lo recaudado de Imesi representa un 0,3% del Producto Interno Bruto de Uruguay, en ejemplos significa que se iguala con el monto que tiene asignado el Ministerio de Desarrollo Social este año y supera el presupuesto anual del Poder Judicial ($ 4.379,6 millones), ubicándose también levemente por debajo de lo destinado a las cárceles ($ 5.015,8 millones).
Comparándonos con la región, un vehículo nuevo de 1.400 centímetros cúbicos cuesta en Uruguay 6.000 dólares más que el mismo auto en Argentina, 9.000 dólares más que en Brasil y 11.500 dólares más que en Chile.
