Donald Trump brindó una rueda de prensa luego de reunirse con Kim Jong-un y firmar un acuerdo conjunto en Singapur en la que anunció que pondrá fin a los «juegos de guerra» que EEUU realizaba anualmente junto con Corea del Sur, evento que suele elevar la tensión en la península por las quejas de Pyongyang.
El presidente estadounidense calificó las maniobras militares conjuntas como inapropiadas y provocadoras. Según explicó, se ahorrarán mucho dinero en los «juegos de guerra». Además, espera «traer a los 32 mil soldados» que se encuentran en el país asiático «de vuelta casa».
«Yo sé mucho de aviones, y es muy costoso», dijo sobre los viajes necesarios para tales operaciones.
El presidente de los Estados Unidos dijo que pasó horas intensas reunido con Kim Jong-un. «Sé cuando alguien no quiere negociar… yo lo siento, es mi instinto, mi talento. Yo creo que él quiere negociar. Lo sabremos muy pronto porque las negociaciones iniciaron», declaró el mandatario.
Trump dijo que desde el comienzo de su encuentro «se llevó bien» con el dictador norcoreano.
«El presidente Kim tiene ante él una oportunidad como ninguna otra de ser recordado como el líder que construyó una nueva era gloriosa de prosperidad para su pueblo», dijo Trump. En ese sentido, añadió que Kim «ya está destruyendo un centro de fabricación de motores» como parte de sus compromisos asumidos.
«También quiero agradecer al presidente Moon de Corea del Sur», dijo Trump al inicio de la conferencia y añadió: «Las conversaciones fueron honestas, directas y productivas».
Según Trump, el dictador norcoreano es un «muy talentoso», a pesar de las faltas en derecho humanos que comete el país asiático.
Trump dijo que, mientras se desarrolle lo pactado en el acuerdo, las sanciones se mantendrán contra Corea del Norte.
«Las sanciones se eliminarán cuando estemos seguros de que las bombas nucleares no son una amenaza», dijo. Y sobre el tiempo que tomaría la desnuclearización, aclaró: «Toma un largo tiempo, científicamente hablando».
Cuando lo preguntaron por qué Kim Jong-un no se comprometió este martes en una completa, verificable e irreversible desnuclearización, Trump respondió: «Solo estuve aquí por un día… El proceso se llevará a cabo».
El presidente estadounidense dijo que revelará más detalles sobre la destrucción de los sitios donde Corea del Norte fabrica los misiles.
Y dijo, en tono amenazante, que tenía 300 sanciones, «grandes y poderosas», listas desde la semana pasada, pero que desistió a aplicarlas porque le parecía irrespetuoso hacerlo en el contexto de la cumbre.
Según Trump, le gustaría visitar Pyonyang en el «momento apropiado» y le extendió la invitación a la Casa Blanca, por lo que se espera más encuentros entre ambos líderes.
Trump y Kim reconocieron en el texto que la cumbre de este martes fue «un acontecimiento histórico» y decidieron «implementar las estipulaciones» del acuerdo «de forma completa y expedita».
La cumbre de Singapur ha sido la primera entre mandatarios de ambos países tras casi 70 años de confrontación y 25 de negociaciones fallidas y tensiones a cuenta del programa atómico norcoreano.